La custodia compartida puede resultar negativa para los niños, según técnicos de EE UU

La decisión de padres separados de compartir la custodia de sus hijos es una opción legal que gana peso dentro de las leyes norteamericanas, pero puede provocar efectos negativos sobre los niños, según un estudio de las autoridades de San Francisco.La directora del Programa de Custodia Compartida de la ciudad de San Francisco, Susan Steim, sostiene que cada vez es mayor el número de jueces que, a petición de los padres, dictan este tipo de custodia. Es frecuente observar, según Steiman, que los hijos de matrimonios separados pasan tres días a la semana con el padre y los cuatro restantes con la madre, y la siguiente semana a la inversa.

Estos niños, amparados por un sistema legalizado en California en 1980, comparten sus vidas entre dos casas, dos vestuarios y dos equipos de juguetes. Defensores de la custodia compartida la consideran un antídoto para contrarrestar los efectos negativos que el divorcio de los padres produce en los niños.

Sin embargo, ya han sido propuestas algunas leyes para que sea el juez encargado del divorcio quien tome la decisión final de aplicar este tipo de custodia. Estas propuestas fueron rechazadas por gran parte de psicólogos infantiles, especialistas en cuestiones de divorcio. El estudio realizado por Steiman refleja que dos de cada tres niños, cuyos padres eligieron voluntariamente la custodia compartida, llevan una vida normal.