Ciudadanos por el Socialismo critica los ataques confesionales al Gobierno
"La fe y los ideales de muchos católicos de este país ni empiezan ni acaban en los idearios particularistas de algunos centros de la Iglesia de carácter clasista, ni tienen por qué coincidir con determinado catecismo". Así reza el comunicado final del congreso de Cristianos por el Socialismo, que se ha celebrado en Madrid al cumplirse el décimo aniversario de su constitución en España
Los 200 representantes de este movimiento de cristianos- progresistas han hecho balance de esta década transcurrida, la mitad de la cual se ha desarrollado en la clandestinidad, al tiempo que analizaban su postura frente a la Iglesia española actual. E n este sentido, critican la desmesura de "los ataques confesionales ala política del actual Gobierno", así como las dificultades de la Iglesia a reconocer "la autonomía del Estado no confesional y de la sociedad pluralista". También han manifestado su preocupación por la reciente iniciativa vaticana de abrir el proceso de beatificación de sacerdotes y religiosos muertos durante la guerra civil, entendiendo que esta medida amenaza con abrir antiguas heridas por el uso parcial de los símbolos religiosos".En esta reunión de Madrid se ha reflexionado sobre el carácter -a la vez utópico y realista- de Cristianos por el Socialismo, la cuestiones que afectan a la situación de la Iglesia en la sociedad española en 1983 y las raíces evangélicas en las que tratan de inspirarse. Un último documento, titulado Un proyecto mesiánico para una sociedad democrática, trató de orientar la actividad futura. La actitud crítica y la ruptura del monólogo en el interior de la Iglesia, la reivindicación de la autonomía, la laicidad de la sociedad frente a antiguos y nuevos intentos de clericalización y la apertura de cauces para una actividad progresista de los cristianos en la sociedad, en la actividad política y obrera marcan algunas de las tareas de futuro de este grupo.
El comunicado final recuerda que "es imprescindible en la hora actual de la Iglesia señalar la identidad propia del grupo, lo que supone de hecho la práctica del pluralismo en la Iglesia española, cuando importantes sectores eclesiásticos y sociales del catolicismo actual tratan de presentar sus particulares opciones teológicas y políticas como las únicas legítimas y auténticas".
Identiricación con Allende
Cristianos por el Socialismo nació en Chile en abril de 1972, con un importante grupo de cristianos conscientes de que el proyecto socialista de Salvador Allende no tenía por qué enfrentarse al mundo católico, cuya gran mayoiría apoyaba a la Democracia Cristiana. Al contrario, veían una profunda convergencia entre la defensa evangélica de los pobres y los derechos de la clase trabajadora. Desde Chile se extendió a otros muchos países. En 1973 aparecía un documento fundacional de Cristianos por el Socialismo firmado en enero, en Avila. La verdad es que ni tuvo lugar en Ávila ni fue en, enero, sino en Castelldefels y fue en el día de San José. Luego fue Italia, Francia, Bélgica, Alemania Occidental, Vietnam, Filipinas, Canadá...Su objetivo es hacer real el pluralismo en la Iglesia, el respeto a quienes han optado por opciones pollíticas de izquierda, también de carácter marxista, así como sumar a los proyectos socialistas las fuerzas cristianas; que históricamente votan derecha. En la prehistoria de Cristianos por el Socialismo están los diálogos rnarxistas-cristianos de los años sesenta, así como las modernas teologías políticas y de la liberación. Figuras conocidas, en España han sido Alfonso Carlos Comín, el jesuita Juan García Nieto, Reyes Mate, Alfredo Fierro, José María Llanos, Juan José Rodríguez Ugarte, José A. Gimbernat. A este congreso ha asistido el teólogo italiano Givilio Girardi, uno de sus inspiradores más cualificados.
