Francia conmemora los 20 años de la muerte de Jean Cocteau y lo rescata del olvido

Francia conmemora la "resurrección" de Jean Cocteau: hoy hace 20 años, el diletante -genial para unos, superficial para otros-, escritor de 74 años de edad, murió. El olvido, o por lo menos el ostracismo, había marginado al autor de Orfeo. Ahora, casi repentinamente, no pocos franceses están descubriendo a Cocteau, del que se publica una primera parte de su diario inédito, El pasado definido.En Francia, hablar de la cantante Edith Piaf o del polifacético Jean Cocteau es como evocar a dioses antiguos. Pero cada uno vive o vivió sus momentos fulgurantes. Hace 20 años, en la madrugada del día 11 de octubre, pero de noche aún, Piaf, la Shakespeare de la canción popular francesa, cerraba los ojos para siempre. Muy pocas horas después, el mismo día, el corazón de Cocteau dejó de latir. Los dos fueron llorados, pero la voz de El himno al amor fue la auténtica protagonista del dolor de todos los franceses.

Veinte años después, sin que ellos tampoco intervengan para nada, Cocteau se venga de Piaf, de la que se recuerda la vida, la voz y la muerte, pero a la que no se celebra como al autor de Los padres terribles. Quizá porque nunca se la ha olvidado tanto como a su amigo el poeta. Toda la actualidad está firinada por Cocteau, hoy, en Francia. Sus obras teatrales más importantes se escenifican en su honor, sin contar el espectáculo Cocteau-Marais, en el que el actor Jean Marais (casi 70 años de edad), uno de los amigos íntimos del multiartista que, ya en 1928, en su obra El libro blanco aclaró su vertiente homosexual, vertebra en escena un muestrario de toda la producción del cineasta de La bella y la bestia.

Desde hace varios días, toda la literatura periodística, televisiva o radiofánica es poca para redescubrir a Cocteau.El esfuerzo más espectacular lo representa, sin duda, el número extraordinario de 120 páginas y 220 fatografias realizado por el diario parisiense Libération. Sus obras más importantes, agotadas, han sido reeditadas especialmente y acaparan las librerías: La voz humana, El testamento de Orfeo, La sangre del poeta, Carta a Jacques Maritain, del que decia que es un alma disfrazada de cuerpo". La obra más original de esta especie de resurrección de Cocteau es El pasado definido, es decir, su diario íntimo, iniciado cuando ya contaba 62 años de edad. Este pri mer volumen (dicho diario lo con tinuó hasta su muerte) abarca sólo dos años: 1951 y 1952. En la más excepcional emisión de televisión dedicada a Cocteau, anoche, en un programa de cuatro horas de duración, además de la actriz María Casares, Vitorio Gassman y otras figuras de la escena, intervino Antonio Gades en un número de flamenco. Con ello se quiso evocar el amor de Cocteau por la tauromaquia, por España y su amistad con Picasso y Luis Miguel Dominguín.