Recuperada la figura del ingeniero Eduardo Saavedra
El ingeniero Eduardo Saavedra (Tarragona, 1829-Madrid, 1912) es objeto, por parte del Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos, de Madrid, de una recuperación cultural de este hombre enciclopédico, con la apertura de una exposición y la publicación del estudio Eduardo Saavedra, ingeniero y humanista, de José Mañas, presentado ayer en la sede del colegio (Almagro, 42).La exposición y el libro sobre Eduardo Saavedra intentan reivindicar a una de las personalidades más enciclopédicas de nuestro país y al ingeniero humanista español más importante del siglo XIX, según se puso de manifiesto ayer en la presentación del libro, publicado por Turner. En el acto intervinieron Enrique Balaguer, presidente del Colegio de Ingenieros de Caminos; Julio Caro, historiador, y José Mañas, ingeniero de caminos y autor del libro. La muestra documental estará abierta hasta el 4 de noviembre.
Eduardo Saavedra fue ingeniero de caminos, arquitecto, arabista, arqueólogo, matemático, historiador y filólogo. Entre otras actividades ocupó la cátedra de Mecánica Aplicada, director de la Real Academia de la Historia, descubridor y primer excavador de las ruinas de Numancia, constructor de ferrocarriles, director de Obras Públicas (1869-1870), vicepresidente de la Real Academia de Ciencias Exactas y fundador y presidente de la Real Sociedad Geográfica.
José Mañas, autor de Eduardo Saavedra, ingeniero y humanista, considera que fue un personaje injustamente olvidado, "con el carisma semejante a los grandes santones laicos de la Institución Libre de Enseñanza, con muchos amigos que eran hombres ilustres del siglo pasado". Define a Eduardo Saavedra por "el polifacetismo y su gran humanidad; trabajó en temas muy dispares y todos ellos los hizo con humanidad y con personalidad".
Como señala el autor, Saavedra reunió el cultivo de las humanidades, la práctica de su profesión técnica, el amor a las bellas artes y el estudio de diversas ramas científicas.
Según Julio Caro "todo lo que sea recordar su figura me parece deuda que tenemos contraída con aquel hombre excepcional y del que las generaciones actuales no parecen saber mucho".
