El 'conflicto de los catecismos'

El Periódico Según una orden ministerial de 1980, los libros de texto sobre enseñanza de la religión y la moral católícas "deberán haber sido autorizados por el Ministerio de Educación, previo dictamen favorable del organismo correspondiente de la Conferencia Episcopal". De acuerdo con esta norma, previamente pactada entre las autoridades civiles del momento y la jerarquía eclesiástica, el Gobierno no carecerá de apoyos jurídicos para la retirada de los 200.000 ejemplares de los polémicos catecismos, en la carencia del nihil obstat laico y civil.

Al Gobierno tampoco le faltan razones para frenar la difusión de un texto, destinado a estudiantes de EGB, en el que el aborto se califica de asesinato y se lo compara a las guerras y el terrorismo. La, comparación no es exacta -sobre todo teniendo en cuenta las limitaciones -del aborto que en España se va a permitir- y la calificación de asesinato, exclusivamente penal,escapa de las competencias eclesiales. (... )

La jerarquía eclesiástica puede perder este pulso. Pero, ¿será el Gobierno el ganador? Hay guerras que no las gana nadie y que, a la postre, todos los contendientes pierden. El Gobierno habrá medido la trascendencia del choque, en nombre de un nihil obstat laico y civil que falta en los textos. El ingrato nihil obstat que tan pródigamente utilizaron las autoridades eclesiásticas ( ... )

24 de septiembre.

Pueblo

La editorial de la Conferencia Episcopal ha distribuido por su propia iniciativa 200.000 catecismos en los que, entre otras cuestiones, se compara el aborto con el homicidio o el terrorismo. Esta opinión, que la Conferencia Episcopal y cualquier ciudadano pueden sostener libremente, y difundirla, si lo desean, desde un púlpito o una publicación, no tiene por qué ser impuesta en las escuelas. Lo lógico es que todos los textos escolares lleven la autorización del Ministerio de Educación, y en casos como los textos de religión, que estos textos salgan del mutuo acuerdo entre el ministemo y la Conferencia Episcopal. Lo contrario, como ahora podría estar sucediendo, no parece otra cosa que la afirmación de la Iglesia como presunto "poder autónomo", atribuyéndose unas facultades y unos derechos que no le corresponden. ( ... )

En vísperas de la discusión en las Cortes de un proyecto de despenalización del aborto en tres casos muy limitados, la jerarquía no puede aprovecharse de su influencia en las escuelas para incluir en los textos opiniones que, siendo perfectamente respetables y dignas de atención como ocurre con las palabras del Papa, no coinciden, probablemente, con las mayoritarias de la ciudadanía ni siquiera con las de muchos católicos. ( ...)

Madrid, 24 de septiembre