El gasoducto eurosiberiano, quedará totalmente finalizado en 1984

A pesar de no haber sido finalizado por completo, el gasoducto eurosiberiano está ya en condiciones de cumplir con los compromisos previstos para el próximo año, según informó ayer en Moscú Borís Shcherbina, ministro para la Construcción de las Empresas de Gas y Petróleo de la URSS. Shcherbina reveló que este año sólo se habrán acabado totalmente 17 de las 40 estaciones de compresión proyectadas para el gasoducto. El resto entrará en funcionamiento en 1984, dijo.El problema de los comprensores era visto en Occidente como el más complicado de los que se les planteó a los soviéticos cuando Estados Unidos llamó al embargo de los países occidentales que suministraban tecnología para el gasoducto, después de que, en diciembre de 1981, fuera decretado el estado de emergencia en Polonia.

Hasta el momento, la URSS había fabricado comprensores de 10 kilovatios y tuvo que producir, a toda prisa, los de 25 kilovatios que eran necesarios para impulsar el gas a través del conducto de 4.451 kilómetros de longitud que van desde los yacimientos de Urengoi (Siberia) hasta la ciudad fronteriza checoslovaca de Uzhgorod. El ministro declaró que se trata de la obra de ingeniería más larga del mundo y que el momento de comenzar a transportar gas a Europa occidental "depende ya solamente de la decisión de los consumidores".

El hecho de que aún falte por poner en servicio más de la mitad de los comprensores no afecta al funcionamiento del gasoducto, que desde ahora mismo podría -según el ministro soviético- transportar 9.000 millones de metros cúbicos de gas al año; es decir, casi el doble del gas que la Unión Soviética se ha comprometido a vender a Europa occidental durante el próximo año, ya que los contratos firmados para 1984 suponen un total de 5.000 millones de metros cúbicos.

Boris Shcherbina tranquilizó a aquellos que afirman que, como consecuencia del suministro de gas a estos países, Europa occidental se convertirá en "rehén" de la energía soviética, diciendo que la URSS cubrirá menos de un 5% de sus necesidades energéticas. Asimismo, haciendo alusión indirecta a los embargos norteamericanos y a la falta de seguridad que dan los otros proveedores de gas y petróleo, el ministro agregó que "la URSS siempre cumple sus contratos".

Fracaso del boicoteo

A su juicio, el boicoteo decretado en Occidente sólo perjudicó a las propias empresas que tenían contratos firmados para esta obra; algunas de las cuales, como la norteamericana Caterpillar, habría perdido unos 200 millones de dólares (más de 300.000 millones de pesetas, al cambio actual) por no suministrar unas orugas para la colocación de tuberías que fueron substituidas de inmediato y con facilidad por otras fabricadas en la URSS. La finalización de la obra seis meses antes del plazo previsto, dijo, demuestra la "capacidad de la URSS para resistir sanciones como las decretadas por EE UU, que creyó que el proyecto era inviable sin su tecnología".El ministro soviético dijo también que su país tiene otros proyecto aún más ambiciosos que éste del gasoducto Urengol-Uzhgorod, que, una vez que sea completado, tendrá una capacidad anual de transporte de. 30.6110 millones de metros cúbicos.

Actualmente, añadió, la longitud total de los gasoductos y oleoductos de la URSS es de 225.000 kilómetros. En el actual quinquenio 1981-1985 deberán de entrar en servicio 56.600 kilómetros más, y para el quinquenio siguiente se esperan construir, afirmó, otros 53.000 kilómetros.