Dos muertos y un herido grave al estallar una bomba un chalé de Platja d'Aro
Dos personas muertas y una tercera herida de gravedad es el balance de la explosión registrada a primeras horas de la mañana de ayer en un chalé en construcción, situado en la urbanización Masnou, en la localidad de Castell-Platja d'Aro (Gerona). El teniente fiscal Luis Sanz señaló, tras visitar el chalé, que "se trata de un atentado". Fuentes de la Delegación del Gobierno descartaron el móvil político o terrorista de la explosión, que, según las investigaciones de los artificieros de la Guardia Civil, habría sido provocado por Goma 2.
En medios oficiales consultados por EL PAIS no se descarta la posibilidad de que el explosivo empleado fuera parte de un contingente de Goma 2 cuya utilización fue autorizada por un período de tres meses a la empresa promotora de la urbanización. El permiso había caducado el pasado día 6.Los fallecidos son los hermanos Manuel y Tomás Monago Trigueros, de 32 y 36 años, respecticamente. El herido es el joven de 19 años Felipe Navarro Aguilera, que al igual que sus compañeros fallecidos es vecino de Sant Feliu de Guíxols. Los hechos ocurrieron entre las 8.15 y las 8.45 horas de la mañana de ayer, cuando los obreros se disponían a iniciar como yeseros por cuenta de la empresa ATY, SL. Los hechos ocurrieron entre las y las 8.45 horas de la mañana de ayer, cuando los obreros se disponían, a iniciar su jornada laboral. El explosivo se encontraba, colocado en la parte alta del edificio en la parte alta del edificio, en una dependencia donde se guardaban ropas de trabajo y algunas herramientas. Fue al remover estos utensilios cuando se produjo la explosión.
El contratista, amenazado
La personalidad de los industriales relacionados con la obra, el contratista Antonio Monjó y Miguel García, propietario de ATY, SL, ambos amenazados por carta junto con otros industriales de Sant Feliu de Guixols hace algunos meses por una autodenominado Comando Autónomo Anticapitalista, propició la hipótesis del atentado, ampliamente comentada entre la población. Miguel García había sido víctima, hace ya algunos meses, de un atentado del que salió ileso. Unos desconocidos dispararon contra él cuando conducía su furgoneta. En aquella ocasión, se especuló con la posibilidad de que el atentado fuera debido al incumplimiento de las exigencias contenidas en las cartas o a sus vinculaciones con la extrema derecha. Antonio Monjó sufrió también un atentado el pasado año al explosionar un pequeño artefacto en la puerta de su domicilio.Otra hipótesis no descartada es la del accidente. Por causas no esclarecidas hasta el momento, podría darse el caso de que una parte del explosivo utilizado por la empresa hubiese quedado en el edificio en construcción explosionando de forma fortuita id ser golpeado por alguna herramienta. Esta hipótesis, en opinión del teniente fiscal de La Bibal, cuyo juez de, Primera Instancia se, ha hecha cargo del caso, es difícilmente asumible porque, "los daños causados requieren una gran cantidad de explosivo".
No obstante, fuentes solventes han informado a este periódico que la concesión a favor del promotor de la urbanización, el empresario de origen belga Alfonso Tops, el pasado día 6 de mayo, y por un período de tres meses, para utilizar 300 kilos de Goma 2, a razón de cinco kilos diarios, podría explicar la presencia del explosivo en la construcción.
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