El Gobierno modificará la Junta de Energía Nuclear y la convertirá en el Centro de Investigaciones Energéticas y Tecnológicas
La Junta de Energía Nuclear (JEN), un organismo que ha supervisado desde su creación el desarrollo de la energía nuclear en España, se convertirá en fecha próxima en el Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas (CIEMAT), al que se dotará de un contenido más amplio que el meramente nuclear dentro del sector energético, según se contempla en la versión actual del Plan Energético Nacional (PEN), que el Gobierno presentará al Parlamento a finales de octubre. Asimismo, el PEN disgregará de la JEN su departamento de residuos radiactivos, del que se creará, previsiblemente dentro de la estructura del Instituto Nacional de Industria (INI), una Empresa Nacional de Residuos (Enresa), encargada de hacerse cargo y disponer en algún lugar del territorio nacional de los residuos radiactivos producidos en las centrales españolas.
Hincapié en la investigación
Martín Gallego, secretario general de Energía y Recursos Minerales, ha declarado a este periódico que el nuevo PEN dedicará un importante y ambicioso capítulo a las nuevas energías y a la investigación energética, de forma que se consolide en España una estructura efectiva de investigación y desarrollo en el frente de las distintas energías. Esta labor se pretende que se lleve a cabo desde el CIEMAT, al que se dotará de cuatro institutos sectoriales encargados de desarrollar la tecnología nuclear, la protección radiológica y el medio ambiente, las energías renovables y la investigación básica.Asimismo, los responsables gubernamentales energéticos tienen previsto ampliar el campo de actuación del Instituto Geológico y Minero, al que se darán cometidos dentro de la prevención de catástrofes y accidentes naturales, tales como inundaciones, terremotos, etcétera. El propósito principal de estas actuaciones, tanto en la nueva JEN como en el Instituto Geológico y Minero, es unificar las actividades, clarificando sus cometidos; establecer una planificación específica; asignar responsabilidades concretas y facilitar la traducción presupuestaria y la puesta en práctica de las decisiones políticas en estos campos.
La decisión de cambiar la estructura y cometidos del JEN obedece a la necesidad de dotar a este organismo, tras la creación del Consejo de Seguridad Nuclear, de unas funciones específicas y adecuadas a las nuevas necesidades en el desarrollo del sector. Se trata de dar al nuevo centro un carácter investigativo concreto dentro de las nuevas energías, no sólo la nuclear, sino también la protección radiológica y el medio ambiente y las energías renovables.
'Cementerios' atómicos
Para cumplir esta misión, el CIEMAT se estructurará en cuatro institutos -quizá reciban otro nombre- bajo una dirección común. Estos institutos serán: 1) Tecnología Nuclear, con responsabilidades en la investigación del ciclo nuclear; 2) Protección Radiológica y Medio Ambiente, encargado de la protección del medio ambiente, en estrecho contacto con la Dirección General de Protección Civil; 3) Energías Renovables, con el fin de investigar en materia de biomasa, energía eólica, etcétera, y 4) Investigación Básica, que se encargará de la cooperación internacional con centros de estudibs nucleares", como el CERN, o aquellos proyectos de fusión nuclear.Respecto a la creación de la Empresa Nacional de Residuos (Enresa), anunciada hace unos meses por la directora general de Energía, Carmen Mestre, la idea es que en su capital participe el INI y el nuevo centro, con responsabilidades exclusivas en el almacenamiento de los residuos atómicos resultantes de las centrales. Tarea fundamental de la empresa será habilitar varios lugares, dentro del territorio nacional, para el almacenamiento de los residuos, tanto los de baja como los de alta radiactividad.
El Gobierno tendrá que afrontar la labor, en esta área, de determinar los lugares apropiados para el establecimiento de estos cementerios y resolver de forma permanente el dilema de deshacerse de los residuos radiactivos.
A este fin, cabe destacar la decisión del Ministerio de Industria y Energía de responsabilizar a la Oficina de Compensaciones de la Energía Eléctrica (OFICO), por una orden publicada en el BOE el pasado mayo, de la tarea de recaudar de las empresas eléctricas el porcentaje de tarifas que se destinará a cubrir los gastos correspondientes a la segunda parte del ciclo del combustible nuclear, tales como el almacenamiento en seco, reprocesamiento y almacenamiento definitivo de residuos.
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