La capital soviética devuelve la visita de una delegación cultural madrileña en 1981

La delegación soviética que protagoniza los actos de la Semana de Moscú, compuesta por un centenar de personas, llegó ayer a Madrid por vía aérea. Artistas de los circos moscovitas, músicos y cantantes de la compañía del teatro Bolschoi, bailarines de los grupos de ballet de los teatros Stanislavsky y Nemirovich-Danchenco, y gimnastas que han conquistado medallas de oro en su país, seleccionados por el Mossoviet -equivalente al gobierno local-, y miembros del propio ayuntamiento de la capital soviética componen la representación.La semana es devolución de la visita que una delegación cultural madrileña, presidida por Enrique Tierno, realizó a Moscú entre los días 21 y 27 de noviembre de 1981. Unos 150.000 moscovitas asistieron en aquella ocasión a las manifestaciones organizadas, entre ellas una exposición sobre la capital española y un festival folklórico. La corporación madrileña donó al pueblo de Moscú una estatua de Miguel de Cervantes, que quedó instalada en el parque de la Amistad entre los Pueblos. Con anterioridad, en 1980, Madrid había recibido como obsequio de la capital soviética una estatua de Pushkin, que quedó ubicada en el parque de la Fuente del Berro, junto a la autovía M-30.

Financiación conjunta

La financiación de la Semana de Moscú corre a cargo de los dos ayuntamientos. La ciudad visitante cubre los gastos de las instalaciones y el transporte, mientras que la anfitriona se encarga del hospedaje. Cinco millones gastará el ayuntamiento madrileño en esta ocasión. En 1981 se invirtieron siete millones para organizar los actos en Moscú. Ningún portavoz de la delegación soviética pudo facilitar ayer el importe de sus gastos, aun que uno de sus integrantes indicó que los artistas trabajan prácticamente gratis.