Medio millón de canarios no puede ver alguna de las dos cadenas
La televisión fue siempre en las islas Canarias, donde medio millón de habitantes se quedan sin ver alguna de las dos cadenas por problemas de infraestructura técnica, un tema polémico. Desde Tenerife se criticó a los responsables de T`VE en Canarias (TVE-C), por favorecer informativamente a la provincia de Las Palmas, donde tiene su sede regional la primera cadena desde 1964. "El hecho de que en la Prensa de Las Palmas haya comenzado a salir alguna que otra crítica en sentido contrario últimamente, permite creer que ese desequilibrio ha empezado a remitir", indica Fernando Fernández, diputado del CDS en el Parlamento autónomo.En la etapa de Fernando Castedo, siendo director del medio en Canarias Pedro Macía, se decidió ubicar el UHF en Santa Cruz de Tenerife. En junio del año pasado, Robles Piquer inauguraba el nuevo edificio, en el que coexisten la primera y segunda cadenas. Los locales fueron adquiridos, en una medida inconfundiblemente política, por el Cabildo de Tenerife, que los cedió a TVE-C corrigiendo así todo posible desequilibrio.
El nuevo director de TVE-C, Juan Ramón Mediavilla, es, un hombre joven, 38 años de edad, que lleva 18 en Televisión. Antes fue director-realizador de programas en Prado del Rey. Cuando llegó, hace seis meses, a Canarias, lo primero que hizo, confiesa, fue empezar a hablar con la gente para llegar a entender "que esto es diferente y hay que hacerlo ver a Madrid".
Lógicamente, su primera tarea fue más concreta y, según explica, consistió en dotar a TVE-C de una estructura empresarial adecuada y de un organigrama de funciones apropiado a partir de los propios miembros del personal. Hoy, el 80% de los puestos orgánicos está ocupado por canarios, entre ellos, el subdirector del centro de producción de Tenerife, Manuel Hernández Casañas; el jefe regional de los servicios informativos, José Luis Cruz González, y el de dicho departamento en Tenerife, Luis Ortega, así como el jefe de personal, Juan Carlos Vega Pérez, entre otros.
A Mediavilla hay algo que le preocupa y que repitió varias veces en la conversación para este periódico: la realización de un sondeo de audiencia. "En el mes de marzo, nada más llegar, planteé a Madrid la necesidad de hacer un estudio de campo con el fin de conocer los gustos y el número de personas que ven el programa regional, así como un estudio social de esa audiencia".
Insiste en que una encuesta de este tipo es fundamental para llevar a cabo sus ideas sobre producción propia. Por carecer de datos sobre cuál es la respuesta de los telespectadores suprimió una programación matinal (de 12.00 a 13.30 horas, de lunes a viernes) que venía emitiéndose en la primera cadena con carácter experimental.
Una cosa es, al menos, cierta, en su opinión: en Canarias los gustos no son los mismos que en Ja Península. Una corrida de toros, por ejemplo, tiene un reducido interés, y ello ha aconsejado que algunas transmisiones hayan sido eliminadas para las islas. "Sería necesario", señala, "que TVE tuviera en cuenta el hecho diferencial canario, que se manifiesta en la distancia, la idiosincrasia, el clima, las costumbres y la geografía", Y una hora menos, habría que añadir. "En efecto, la diferencia horaria en Canarias es un dato muy importante, que plantea la necesidad de tener una cierta flexibilidad respecto a la programación. Los niños de las islas, por ejemplo, se han visto discriminados, ya que a la hora de la emisión infantil la mayoría está en la escuela o en la playa", indica el director de TVE-C.
"Con Pedro Macía la televisión canaria sacó el cuello", declara Ángel Alcobendas, representante de la sección sindical de UGT en TVE-C en Las Palmas. En su opinión, el anterior director regional puso en pie al personal y sacó al medio de su letargo. El paso de Macía es valorado, en este sentido, como positivo, en lo que coincide su sucesor. El portavoz sindical encuentra empero un lado negativo: "Hizo trabajar demasiado a la gente y creó cierto malestar al establecer pluses especiales". Mediavilla, por su parte, desaprueba que no haya creado la necesaria infraestructura para hacer el volumen de programas que se propuso.
El programa sobre el agua
El principal problema con el que se ha tropezado el actual director se produjo recientemente, cuando el 27 de julio pasado TVE-C no emitió un debate so bre el problema del agua en La Palmas, en el programa Directo noche de cada miércoles, al suspenderlo el propio Juan Ramón Mediavilla, quien consideró que los invitados no eran los adecua dos. Como consecuencia de tal decisión, dimitieron la jefe regional de programas y emisiones Mari Carmen Iza, y el director y presentador del espacio, Ángel Rodríguez Quiroga. El incidente produjo polémica en la Prensa local, que llegó a especular con la posibilidad de que en medios del Gobierno autónomo y del Ayuntamiento de Las Palmas se hubiera presionado para veta aquel debate sobre un tema que sigue siendo conflictivo en la actualidad. El portavoz del Gobierno canario, Héctor de Armas, y el alcalde de la ciudad, Juan Rodríguez Doreste, negaron la acusación y el director del centro justificó la medida como propia de sus responsabilidades. Dos semanas después el programa fue dedicado por entero al tema con otra presentadora, la locutora María José Gil.La sección sindical de UGT en TVE-C en Las Palmas llegó a solicitar la dimisión de Mediavilla, quien, transcurridos algunos días de aquello, cree que un incidente como el citado cobra tal magnitud "por tratarse de TVE". El diputado del CDS Lorenzo Olarte presentó entonces una interpelación en el Parlamento regional dirigida al Gobierno autónomo, y el también miembro de dicho partido Fernando Fernández planteó en la misma cámara una proposición no de ley para solicitar la creación de una comisión parlamentaria de control de TVE-C.
La oposición contempla con un tono crítico la actuación de este medio. Francisco Marcos, portavoz del Grupo Popular en el parlamento autónomo, señala que la televisión en Canarias es menos partidista que a nivel nacional, pero considera que falta una programación más identificada con los problemas de las islas. Algo similar opina Oswaldo Brito, diputado nacionalista, portavoz del Grupo Izquierda Canaria en el parlamento regional.
Tres horas de producción
Unas tres horas dianas produce el centro regional de TVE-C, de las cuales una corresponde al UHF. Si la diferencia horaria con la Península entraña un cierto desajuste entre la oferta y la demanda televisivas en Canarias, también es cierto que permite, disponer de una hora de máxima audiencia, las 22.45, para incluir diariamente un programa regional cuando, al mismo tiempo (23.45, hora peninsular), se cierra la programación nacional.Unas 220 personas integran la plantilla de TVE-C. "El problema fundamental aquí es el capítulo 1 del presupuesto, el personal", comenta el director de TVE-C. Este centro regional necesita un incremento de su plantilla y una mayor dotación de medios.
TVE-C aportó durante el ejercicio de 1982 a los presupuestos generales de TVE la cantidad de 1.200 millones de pesetas, lo que la convierte, después de Madrid, en el más importante centro de producción que genera publicidad. "Este centro es rentable y globalmente sus medios son insuficientes", afirma Mediavilla.
Los corresponsales de las restantes islas cuentan con medios obsoletos. Las filmaciones en esos lugares se llevan a cabo con una cámara de 16 milímetros sin sonido, y las crónicas son enviadas por teléfono. Serían necesarios equipos ligeros de periodismo electrónico. "Para ello deberíamos tener un presupuesto de personal especial para dotar esas islas de los medios técnicos adecuados", reclama Mediavilla. El presupuesto de este centro de producción regional asciende a unos 224 millones de pesetas, que es considerado insuficiente.
El presidente del comité de empresa de TVE-C en Las Palmas, Santiago López Medina, advierte "buena voluntad en el nuevo equipo directivo para solucionar los problemas" y propone como ideal que todo el personal sea fijo, poniendo fin a la política de contrataciones.
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