"Con o sin referéndum, el Sáhara es y seguirá siendo marroquí", dice el rey Hassan II

El rey Hassan II de Marruecos declaró el sábado en Rabat que su país "no pretende rehuir el referéndum de autodeterminación en el Sáhara, y está dispuesto a garantizar todas las facilidades necesarias para que éste se celebre". El rey recalcó, sin embargo, que "con referéndum o sin él, el Sáhara es y seguirá siendo territorio marroquí".

Esta doble afirmación, aparentemente paradójica, fue pronunciada por primera vez el pasado día 8 de julio, cuando el rey de Marruecos declaró que "aunque la respuesta al referéndum fuese un no, lo cual sería inimaginable, nada nos obligará a entregar nuestro Sáhara en bandeja de plata a un montón de mercenarios".

Hassan, sin embargo, reiteró el sábado pasado en un discurso televisado la necesidad de un referéndum, manifestando su convencimiento de que los habitantes de esta región no harán sino confirmar el arraigo de sus antepasados a la soberanía marroquí", y culpando a sus oponentes de todos los retrasos habidos hasta ahora. "Aquéllos que dudan sobre el resultado de la consulta son los que obstaculizan el proceso", añadió el monarca en su discurso.

Argelia y Libia

Según Hassan II, el presidente libio, Muamar el Gadafi, que visitó Rabat a principios de julio, "parece estar convencido de las pruebas", que le fueron presentadas por Marruecos con relación al tema, y parece pensar también "como los marroquíes, que sería nefasto instaurar un mosaico de mini-estados en el mundo árabe".Por otra parte, y evocando su reciente encuentro con el presidente argelino, Chadli Benjedid, el soberano marroquí dijo haber notado ciertas dudas en relación con el Sáhara, pero añadió que había observado en el presidente Benjedid "una buena disposición para la edificación de un gran Magreb a todos los niveles y en todos los dominios". Hassan añadió que había hallado esta misma disposición en el presidente tunecino, Habib Burguiba, tras una serie de contactos entre los emisarios de los dos países.

En El Aiún, los miembros del Consejo Consultivo Saharaui se pronunciaron a favor de la marroquización del Sáhara, aunque hay que tener en cuenta que la población del Sáhara occidental ha variado mucho en los últimos años a resultas de la política de desarrollo prioritario llevada por Marruecos en esta región.

Según el último censo español, la población era de 65.000 habitantes. El censo marroquí de 1982, sin embargo, arroja una cifra total de 180.000 habitantes, de los cuales contabiliza 115.000 sólo en la provincia de El Aiún. La progresión demográfica es debida a la fuerte inmigración de los marroquíes del norte, atraídos por las ventajas que les ofrece el Estado en el Sáhara occidental.

Dramáticamente infraequipado en 1976, el Sáhara es desde entonces zona prioritaria en los presupuestos de inversión marroquíes sin contar los gastos militares de los ocho últimos años, especialmente para la manutención de un ejército permanente de unos 80.000 soldados, gastos que por otra parte suponen un esfuerzo considerable en época de crisis.