Los obispos acusan al Gobierno de hacer una política alejada de la moral católica

El actual Gobierno socialista presenta "una impronta laicista que difiere en puntos importantes del pensamiento católico", con lo que se corre el riesgo de sustituir el carácter de un Estado no confesional "por la beligerancia oficial en favor de una sociedad que relega lo religioso y lo moral a la esfera estricta de lo privado". Esta opinión está contenida en los documentos episcopales sobre la visita del Papa a España y sobre la fe del pueblo español, que ayer fueron facilitados a los medios de comunicación por el secretario de la Conferencia Episcopal Española, Fernando Sebastián.

En los documentos se indica que España ha experimentado desde 1975 "uno de los cambios más espectaculares de su historia" y "ha optado con firmeza por un régimen político de convivencia democrática. Como jalón importante de este proceso", siguen los obispos, "es de destacar el acceso democrático al poder, por primera vez en su historia, de un partido como el socialista, que en su tradición histórica y en su programa de gobierno presenta una impronta laicista que difiere en puntos importantes del pensamiento católico".Aunque no pocos militantes y votantes del PSOE se declaran cristianos y miembros de la Iglesia, se añade en los documentos, "con el paso del tiempo se viene manifestando la tendencia, ya presente en etapas anteriores, a implantar una escala de valores marcada por el humanismo agnóstico y disociada en gran parte del patrimonio cultural y moral del pueblo español".

Beligerancia oficial

"Por este camino", se dice en una de las partes más importantes de los escritos, "se correría el riesgo de sustituir el carácter de un Estado no confesional, garante de la libertad religiosa y cooperador con las iglesias, como es el que describe la Constitución (artículo 16), por la beligerancia oficial en favor de una sociedad que relega lo religioso y lo moral a la esfera estricta de lo privado".En opinión de los obispos, el ejercicio de la libertad religiosa "no tiene por qué ser factor de enfrentamientos, predominios ni exclusiones". Agrega que, a pesar de los cambios registrados en la sociedad española, los cristianos españoles siguen bautizando a sus hijos, solicitan para ellos los sacramentos católicos y piden que reciban educación religiosa. En este sentido, los documentos valoran muy positivamente la acogida dada por numerosos españoles al Papa durante su visita a nuestro país.

Entre los aspectos negativos detectados en los últimos años, los documentos episcopales señalan fuertes movimientos de autocrítica y de revisión que no respondían a las orientaciones conciliares, así como enfrentamientos en el interior de la Iglesia.