El Ministerio de Agricultura tendrá sólo 4.000 funcionarios al final de los traspasos autonómicos

A final de año no habrá más de 4.000 funcionarios dependientes del Ministerio de Agricultura, cifra que supone el 10% de los funcionarios que tenía este departamento al comenzar el proceso autonómico; el resto habrá sido transferido a las Comunidades Autónomas, según manifestó ayer Carlos Romero, ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, tras la reunión que celebró con los consejeros de Agricultura de todas las comunidades. En la reunión se abordé el estado actual de las transferencias, el proceso de adhesión a la Comunidad Económica Europea y la parte agraria del plan económico a medio plazo que está preparando el Gobierno.Carlos Romero indicó que una gran parte de las transferencias que tenía que realizar su departamento han sido efectuadas ya y que de aquí a final de año se llevarán a cabo las que quedan pendientes por parte del Instituto de Reforma y Desarrollo Agrario (IRYDA), Instituto para la Conservación de la Naturaleza (ICONA) y en materia de fraudes y laboratorios y semillas y plantas de vivero. En relación con las competencias del IRYDA, en lo que respecta a la Ley de Fincas Manifiestamente Mejorables, Miguel Manaute, consejero de la Junta de Andalucía, manifestó que esta comunidad sigue reivindicando las competencias en materia de aplicación de esta ley que le corresponden de acuerdo con el Estatuto de Autonomía. También indicó que se mostraba optimista sobre el tema.

En relación con las Cámaras Agrarias, competencia que han sido reivindicadas por algunas comunidades, principalmente Cataluña, Carlos Romero indicó que no era un tema que se hubiera abordado en la reunión e indicó que está previsto presentar a las Cortes un proyecto de ley de Cámaras y que en estos momentos se están recogiendo las consideraciones que en este tema planteaba la LOAPA.

Sobre el apartado agrario del plan cuatrienal indicó que las líneas maestras parten de que durante los próximos años no va a disminuir la población activa agraria como venía sucediendo hasta ahora, por lo que habrá que hacer frente a este reto histórico.

También indicó que las medidas están en función de la perspectiva de la adhesión a la CEE y que se pretende lograr una mayor ajuste entre oferta y demanda de producción ya que "no podemos mantener excedentes de producción que no tengan salida". Finalmente manifestó que las medidas también tratarán de reducir el desequilibrio en la balanza comercial agraria, provocado por las importaciones de maiz y soja.

Para ello se promoverá un modelo ganadero con un tipo de alimentación basado en los recursos nacionales.

Sobre la adhesión de España a la CEE, señaló que es un tema importante que obliga a mantener una posición única de carácter nacional para lo que se va a desarrollar un proceso de información de las consecuencias que tendrá y del calendario con las comunidades autónomas e indicó que el tema de la negociación agrícola forma parte de un proceso global. Por último expresó su rechazo del documento recientemente enviado por la Comisión Europea al Consejo de Ministros.