Una campaña 'tercermundista'

A media tarde de ayer, la escasa, aunque prestigiosa, audiencia del programa McNeill-Lehrer report, de la televisión pública, tuvo ocasión de ver y escuchar al presidente del Gobierno español, Felipe González, en una entrevista grabada por mañana.Los organizadores del viaje presidencial rechazaron ofertas de las grandes cadenas, CBS, NBC y ABC, sobre una intervención del mandatario español en alguno de los programas de gran audiencia.

Eligieron la televisión pública, que aunque es vista por una prestigiosa elite política, no llega al gran público. Quizá la decisión sobre la única aparición televisiva de Felipe González en este país se deba a la compañía de relaciones públicas americana, la Haley Kiss and Down, que hasta el momento, y por lo que se refiere a la Prensa, ha realizado una campaña propia de países tercermundistas.

Así, el Wall Street. Journal publicó el lunes cuatro páginas de publicidad sobre España y la visita del presidente, en las que se recogían artículos sobre las relaciones España-EE UU, el gasoducto con el norte de África, la situación económica, el vino de Rioja, la situación de la agricultura y la industria y los paradores y el flamenco. Todo ello acompañado de anuncios como el de la agencia Efe, que se califica la más importante agencia de noticias de habla hispana, e informa del nombramiento de Ricardo Utrilla como director. Este tipo de insertos publicitarios sólo lo realizan países del Tercer Mundo, y en los últimos años ningún país europeo ha acudido a publicidad de este tipo con motivo de la visita de sus mandatarios. La publicidad en el mencionado diario neoyorquino, que ha costado por encima de los 100.000 dólares (más de 14 millones de pesetas), poco contribuye a la imagen moderna de España y su presidente, imagen por otra parte reconocida en la Prensa norteamericana sin necesidad de publicidad del viejo estilo, en la que los tópicos del flamenco y las corridas de toros han vuelto a salir a relucir.