Acuerdos de valoración de transferencias tras la entrevista de Felipe González y Jordi Pujol

Una próxima reunión del plenario de la comisión encargada de la valoración económica de los traspasos efectuados a la Generalitat de Cataluña es el único acuerdo puntual de la cena que mantuvieron el viernes el presidente del Gobierno, Felipe González, y el titular de la Generalitat, Jordi Pujol, en los jardines del palacio de la Moncloa. Pujol reiteró a Felipe González, en el curso de la entrevista, que se prolongó durante tres horas, su oferta general de una colaboración institucional en profundidad y el deseo de la Generalitat de corresponsabilizarse en la política de concertación.

Jordi Pujol planteó el encuentro con Felipe González de una manera totalmente diferente a las anteriores reuniones con el responsable del Ejecutivo español: se presentó en Madrid casi a hurtadillas en la tarde del viernes y, por primera vez desde que ocupa la Presidencia de la Generalitat, no viajó acompañado de la legión de informadores catalanes invitados que siguen habitualmente sus viajes. Muchos consellers se enteraron de la entrevista por los medios de comunicación y, si no hubiese sido por los portavoces de la Moncloa, hasta ayer no se hubiera conocido la reunión entre ambos. El responsable del Gobierno catalán sabía de antemano que no habría ningún acuerdo trascendente al final de la entrevista y pensó que no era adecuado anunciar con antelación la entrevista, como hace habitualmente, e insistir nuevamente en las críticas a la política autonómica del Gobierno y lo que califica de involución autonómica en todos los frentes de la actividad política.

El acuerdo respecto a las valoraciones, alcanzado entre ambos políticos, prevé que, durante la primera quincena de julio, se reunirá el plenario de la comisión y que con anterioridad se reunirán las diferentes comisiones y se agilizarán los contactos a nivel técnico. La Administración socialista impugnó el acuerdo sobre las valoraciones de las transferencias suscrito en febrero de 1982 entre la anterior Administración de UCD y la Generalitat, por entender que la cifra final de la valoración económica estaba inflada en 21.000 millones de pesetas.

Nueva entrevista en otoño

"Hemos estado analizando", manifestó Pujol a la salida de la Moncloa, "por qué no nos hemos entendido en este tema durante todos estos meses. Le he expuesto al presidente del Gobierno que es urgente una solución en este tema, ya que ellos ni pueden ni quieren seguir alargándolo eternamente". Pujol sostuvo la tesis de que es la Administración central la que "ha retrasado deliberadamente" la solución al tema de las valoraciones.

Pujol reiteró a Felipe González su deseo de mantener una estrecha colaboración institucional que sirva de pantalla a las demás comunidades autónomas y la necesidad de fijar un nuevo estilo en las relaciones que impida el progresivo aislamiento de la Generalitat en unos momentos en que, a su juicio, el Gobierno central dedica todos sus esfuerzos en materia autonómica al País Vasco. En este sentido, Pujol y Felipe acordaron volverse a ver de nuevo en el mes de octubre y regularizar sus entrevistas.

"La Generalitat está dispuesta a hacer política de Estado. El hecho de que la autonomía funcione en Cataluña es imprescindible para el buen funcionamiento de la España de las autonomías", dijo Pujol. Este diálogo permanente servirá, entre otras cosas, para evitar el uso continuado del Tribunal Constitucional cada vez que haya diferencias entre las dos instituciones.

Otros dos temas objeto de análisis a lo largo de la entrevista fueron la creación del tercer canal de televisión (el canal autonómico) y la crisis económica. El tema del tercer canal, que la Generalitat considera prioritario, sigue bloqueado después de la reunión a la espera de la ley marco sobre canales autonómicos que prepara el Gobierno.