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En libertad provisional un jefe militar procesado por la operación del 27-O

Carlos Yárnoz

El teniente coronel Juan Fernández Hidalgo, uno de los cuatro jefes militares procesados el pasado año por su presunta implicación en la operación involucionista prevista para el 27 de octubre, fue puesto ayer en libertad provisional a propuesta del juez militar que instruye la causa, coronel José Muñoz Santos. La decisión, adoptada en último término por el gobernador militar de Madrid, ha sido tomada en un momento de especial sensibilidad en los minoritarios círculos ultraderechistas militares, tras la campaña en favor de los condenados por el 23-F realizada la pasada semana en las páginas de El Alcázar.

Fernández Hidalgo, procesado "por un presunto delito de conspiración para la rebelión militar", abandonó en la tarde de ayer el castillo de Santa Catalina (Cádiz), donde se encontraba recluido desde el 16 de noviembre pasado. La noticia de su puesta en libertad fue difundida por el Ministerio de Defensa a la una de la tarde de ayer. A esa hora, el abogado del teniente coronel, José María del Nido, desconocía la decisión del juez militar. Poco después se puso en contacto telefónico con el procesado. Desde el castillo de Santa Catalina, Fernández Hidalgo le confirmó la noticia y le expresó su alegría por el hecho.En las próximas horas, el teniente coronel deberá desplazarse a Madrid para presentarse en la sede de la Capitanía General de la I Región Militar, ya que es en esta región en la que se instruye la causa 200/82, sobre la citada maniobra involucionista. Con posterioridad, es muy probable que viaje a Valencia, donde reside su familia. Tras su puesta en libertad, el teniente coronel ha quedado a disposición del juez instructor, y en su día será juzgado, junto al restó de procesados, en el consejo de guerra que se realizará en la I Región.

Falta de pruebas

A principios de octubre pasado fue descubierto en Madrid un supuesto intento golpista previsto para el 27 del mismo mes, un día antes de las elecciones generales, según informó entonces el ministro de Defensa, Alberto Oliart. Tras el descubrimiento fueron detenidos en Madrid los coroneles Manuel Muñoz, asiduo visitante de Jaime Milans del Bosch, y Jesús Crespo Cuspinera, así como el hermano de éste, el teniente coronel José Enrique Crespo Cuspinera. Los tres ingresaron en la prisión militar de Alcalá de Henares, y allí continúan.A los detenidos les fueron ocupadas diversas listas de militares, así como planos de aeropuertos, edificios oficiales y centros castrenses. En los escasos interrogatorios a los que han sido sometidos los detenidos -cinco o seis-, éstos, que solían reunirse en una cafetería de la calle de Fuencarral, en Madrid, han dicho que las listas correspondían a compañeros de sus promociones, ya que, como dijo el coronel Muñoz, deseaban saber en qué destinos estaban sus amigos y cuándo les correspondía ascender.

Respecto a Fernández Hidalgo, en el momento de descubrirse la operación del 27-O era el jefe de la Segunda Sección -dedicada a información- de la III Región Militar (Valencia). Días después fue destinado forzosamente a Badajoz, donde fue detenido y conducido a prisión. Ha sido interrogado en cinco ocasiones en relación con dos reuniones que mantuvo en Madrid, en julio y septiembre del pasado año, con José Enrique Crespo Cuspinera. El militar negó inicialmente dichos contactos, pero luego reconoció que se reunió con Crespo por razones de amistad. Por otro lado, unas pruebas caligráficas realizadas sobre un documento ocupado a los procesados demostró que ni las anotaciones ni la firma que aparecían en el escrito pertenecían a Fernández Hidalgo.

A mediados del pasado mes de febrero, el propio ministro de Defensa, Narcís Serra, manifestó que existían grandes dificultades para encontrar pruebas concretas contra los procesados. En este sentido, cabe señalar las escasas ocasiones en que han sido interrogados los detenidos -cinco o seis veces-, así como el hecho de que Milans del Bosch, de quien se aseguró que estaba informado de la operación, no ha sido interrogado en relación con esta causa.

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Sobre la firma

Carlos Yárnoz
Llegó a EL PAÍS en 1983 y ha sido jefe de Política, subdirector, corresponsal en Bruselas y París y Defensor del lector entre 2019 y 2023. El periodismo y Europa son sus prioridades. Como es periodista, siempre ha defendido a los lectores.

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