Fallece un niño tras resultar herido por una pistola de juguete
José María Calvo, de doce años, murió a consecuencia del impacto en el cerebro de un proyectil procedente de una pistola de juguete que estaba manejando, en compañía de dos amigos, en su domicilio de Santurce (Vizcaya). La familia del fallecido ha anunciado su intención de agotar todas las medidas legales contra la empresa fabricante de este tipo de pistolas que, según evidencia este caso, pueden resultar mortíferas.
El suceso se produjo poco antes de las nueve de la noche del pasado martes, cuando José María jugaba con la pistola en la vivienda familiar donde se encontraba también su madre. Ésta, que se hallaba cosiendo, se percató de lo ocurrido al escuchar la detonación y comprobé que su hijo yacía en el suelo ensangrentado.José María Calvo fue conducido en un primer momento a una clínica próxima a su domicilio por la Policía Municipal de Santurce y posteriormente a la Residencia Enrique Sotomayor, de Cruces (Baracaldo), donde el equipo médico que le atendió informaba, a las pocas horas de su ingreso, que el herido se hallaba "clínicamente muerto", dejando de existir, definitivamente, en la tarde de ayer.
José María Calvo presentaba un orificio de entrada a la altura del parietal derecho y, según revelan las radiografías que se le practicaron, tenía alojado en la cabeza un objeto extraño, que le causó "una modificación irreparable en las estructuras del cerebro".
El objeto alojado en el cerebro era en realidad una pequeña bola o canica de acero que actuó como proyectil en lugar de las habituales bolas de plástico empleadas en este tipo de armas de juego. La pistola en cuestión es una pequeña arma metálica que lleva grabada la inscripción "policía internacional" y las siglas "FBI", de fabricación española, según reza en la empuñadura. Utiliza como carga un pequeño fulminante de pólvora, tradicionalmente incorporado a las pistolas de juego. El padre de la víctima, Eugenio Calvo, que ha declarado que su hijo tenía la pistola desde hacía tiempo, aunque desconoce su procedencia, ha anunciado la intención de la familia de utilizar todas las medidas legales contra la empresa fabricante del arma, por su presunta responsabilidad en la muerte de su hijo.
La venta de este tipo de pistolas está totalmente prohibida por el artículo 6º del Reglamento de Armas, que prohíbe la comercialización de "las imitaciones de armas de fuego que pueden ser transformadas en armas de fuego verdaderas". Portavoces de la Consejería de Comercio y Consumo del Gobierno vasco han confirmado que desde hacía un año el citado departamento autónomo había ordenado la intervención de esta modalidad de armas de juego.
