Los presidentes de Italia, Argelia y Tunicia inauguran el primer gasoducto transmediterráneo

El ministro español de Industria y Energía, Carlos Solchaga, mantendrá hoy, jueves, una entrevista con su homólogo argelino, Balkaceni Nabi, en el marco del programa de reuniones políticas acordado entre los dos Gobiernos para buscar una solución a las exportaciones de gas natural licuado argelino a nuestro país. Ayer los presidentes de Argelia, Italia y Tunicia inauguraron solemnemente en Túnez el primer gasoducto transmediterráneo entre Argelia y la costa italiana, por el que transitarán 12.500 millones de metros cúbicos destinados al mercado italiano.El ministro Solchaga evocará con sus interlocutores argelinos la proposición española de reducir la vulnerabilidad europea en materia de fuentes de aprovisionamiento energético, en base a la construcción de un gasoducto norteafricano. Argelia se encuentra interesada en el proyecto, a justo título, pero hasta ahora no hay la menor indicación de que esa iniciativa influya en el curso de las negociaciones sobre el contrato Enagas. La parta argelina considera que son dos temas distintos.

Por el momento, la única decisión concreta a que habrían llegado los negociadores argelinos y españoles es atrasar hasta finales de agosto el plazo que se había acordado durante la visita hecha a Argel por el vicepresidente del Gobierno, Alfonso Guerra, en marzo pasado, para concluir un arreglo satisfactorio para las dos partes.

Las cantidades suscritas en 1975 por Enagás (45.000 millones de termias por año) exceden en más de la mitad de las necesidades españolas de gas natural argelino, por lo que la parte argelina propone que España retire de forma escalonada esa cifra, aparte de eIevar el precio del gas a los mismo niveles alcanzados con otros clientes de este país, concretamente franceses, belgas e italianos.

La denuncia del contrato supondría, según Carlos Solchaga, el fin de las expectativas de desarrollo del gas natural en España, lo que no parece prudente, habida cuenta de que esa materia energética noble es precisamente la que está en camino de ser empleada de forma masiva en el mercado occidental. Este es un argumento que ha barajado la parte argelina, la cual ha insistido en plantear a los españoles una definición de la opción energética de nuestro país, con una visión "más hacia el futuro" del tema y de todo lo que puede ganar España de un incremento de las relaciones con Argelia.

Los empresarios españoles que participan en la edición anual de la Feria Internacional de Argel, inaugurada ayer, han expresado su preocupación por un eventual fracaso de las conversaciones sobre el gas, que supondría una reducción drástica de las compras argelinas. La balanza comercial hispano-argelina, sigue siendo deficitaria para Argelia en más de 50 millones de dólares según la versión de España y en 500 millones de dólares según la version de Argelia. Como puede verse, las dos versiones son bastante distintas.

Tecnología sin precedentes

El primer gasoducto transmediterráneo, una ambiciosa obra tecnológica sin precedentes, entró ayer en funcionamiento cuando los presidentes de Argelia, Chadli Benyedid; Italia, Sándro Pertini, y Tunicia, Habib Burguiba, pulsaron simbólicamente los botones de uno de los paneles de mando. A través de fondos submarinos que alcanzan los 600 metros en el estrecho de Messina, el gasoducto dispone, a lo largo de 2.498 kilómetros, de una canalización bajo tierra de 1,20 metros de diámetro, y tres submarinas de 0,50 metros cada una.Por primera vez, los argelinos exportan su gas natural sin tener necesidad de licuarlo, lo que encarece considerablemente su precio de venta. Los italianos, al término de un largo proceso de discusiones, han aceptado financiar parcialmente las importaciones de gas natural, al aprobar un crédito del millón de unidades térmicas en 4,41 dólares, de los que 3,88 son abonados por la firma italiana importadora Enit, y 0,53, financiados por el Gobierno.