El torero de moda

Paco Ojeda es el torero de moda. Tras un comienzo relativamente tardío en esta profesión, después de tres temporadas de alternativa en las que toreaba progresivamente menos corridas, tras dudas y desengaños y a la edad de 28 años, de repente Ojeda está de moda. Estuvo bien en las fallas de Valencia, triunfó en la feria de Sevilla, y va en cabeza en cuanto a corridas toreadas. Ahora. viene tres tardes en San Isidro, y puede sumar más. de 60 tardes esta temporada."Estoy con moral, con confianza; por fin empiezo a rodar y a ver lo bueno", dijo a, er Ojeda. Señaló y que lo bueno quiere decir los billetes, el dinero.

Los aficionados que le han visto torear discrepan sobre el estilo y las posibilidades de Ojeda. Discuten si es un artista o sólo un valiente. Dicen que intenta hacer un toreo de quietud, a base de valor, y parece que conecta rápido con el tendido. "Yo lo defino como un toreo sin trucos", dice el matador. Mucho del interés por este toféúo radica en estas discusiones y dudas; es un diestro todavía sin definir. En cierto modo Ojeda confirma esto: "Sé lo que quiero, pero no sé lo que es".

Ojeda nació en Sanlúcar de Barrameda, Cádiz, el más pequeño de nueve hermanos, y de joven trabajó en el campo. No había antecedentes taurinos en su familia, y no toreó en público hasta los 17 años. "Podría haber sido antes, pero no quise hacer el ridículo", dijo. Comenzó entonces un largo aprendizaje. "Yo mismo me hice torero sin ayudas ni recomendaciones", dice Ojeda. "Desarrollé mi propio estilo, mi propia personalidad".

Ojeda tomó la alternativa en 1980 y toreó 19 corridas. Su apoderado fue Carnará. La temporada siguiente sólo fueron 17 fechas, y Ojeda y Camará se separaron. "Muchos taurinos me acusaron de torpe; decían que yo no tenía cabeza", dice Ojeda. "Yo tenía la ilusión perdida".

Eso cambió la temporada pasada, cuando José Luis Marca se hizo cargo de la carrera de Ojeda. "Vine tres tardes a Madrid en agosto y septiembre para matar toros duros" dice Ojeda. "Cada vez que pasaban olían a enfermería. Sin embargo,, estuve bien. Esto me dio moral". Toreó en otras plazas importantes y en Sevilla, "donde maté una corrida de seis toros, corté cuatro orejas y acabé con el papel".

"Todo se lo debo a José Luis Marca", dice el torero. "El creyó en mí, ha sido como un padre". Manifestó que el contrato original que tenía con Marca, para 30 corridas, ha sido cambiado. "Como voy a cobrar bastante más de lo que pensamos, Marca no creíajusto pagarme sólo lo estipulado", dijo Ojeda. "Éste es un gesto poco corriente. Me ha dado moral, ilusión. Hay que tener cariño por alguien que obra así. No todo son orejas y dinero".