Alberto de Lieja,
hermano del Rey Balduino de Bélgica, impuso ayer la Gran Cruz de la Orden de la Corona al presidente de la Generalitat de Cataluña, Jordi Pujol, durante una recepción ofrecida en el salón de la Virgen de Montserrat de la sede del Gobierno Catalán. En presencia de los consellers y varias autoridades civiles y militares de Cataluña, así como una representación diplomática belga, Pujol pidió al príncipe que trasmita a su Rey la voluntad catalana de incrementar las relaciones económicas y culturales con Bélgica y le entregó una reproducción de plata de una estatua de San Jorge del siglo XIV. Alberto de Lieja se encuentra en España al frente de una delegación comercial belga. Durante su reciente estancia en Madrid fue recibido en audiencia por el Rey Juan Carlos y por el presidente del Gobierno, Felipe González.
