La autonomía ceutí, pendiente de las Cortes

Dos años después de que el Ayuntamiento de Ceuta cumpliera el precepto recogido en la disposición transitoria quinta de la Constitución para acceder a la autonomía, se está a la espera de que las Cortes Generales den el segundo paso con la promulgación de la ley orgánica que autorice a convertir a esta ciudad en una comunidad autónoma.

A pesar del tiempo transcurrido, los diversos partidos políticos no se han sentado en la mesa de negociaciones en ningún momento. En la anterior legislatura, cuando UCD tenía los tres parlamentarios con que cuenta Ceuta, comenzaron a redactar un anteproyecto de estatuto que no pudo ser enviado a las Cortes debido a su disolución anticipada. Ahora con el diputado y los dos senadores pertenecientes al PSOE será este partido el que haga valer su anteproyecto, que nunca pudo ser discutido por los ucedistas ya que no contestaron nunca a las peticiones de negociación.

Fuentes socialistas declaran que para el otoño estará aprobado el estatuto. Será difícil que antes de las municipales pueda tramitarse la ley orgánica, pero existe la promesa formal del Gobierno de hacerlo tras los comicios del mes de mayo.

La autonomía de Ceuta se basará institucionalmente en el ayuntamiento de la ciudad. Está previsto que los veinticinco concejales cumplan una doble misión, la de simples ediles y la de diputados de la comunidad autónoma. La financiación del ente autonómico ceutí estará basado en un arbitrio sobre importación de mercaderías que es el mismo que ha permitido al ayuntamiento hacer frente a unos presupuestos de 2.200 millones de pesetas en una ciudad con 70.000 habitantes.

A pesar de que la mayoría socialista en las Cortes garantiza la aprobación del anteproyecto redactado por el Partido Socialista de Ceuta-PSOE, éste último ha prometido negociaciones con los restantes partidos que están previstas comiencen en primavera.