Un sector de los 'poli-milis' se integrará en ETA Militar

Un sector de ETA Político-militar se integrará próximamente en ETA Militar, según pudo saber ayer EL PAÍS en fuentes de toda solvencia. Un año después de la escisión que dividió a la antigua ETApm en los sectores VII y VIII Asamblea, este último se enfrenta a una nueva división interna. En aquella asamblea, los octavos decidieron romper la tregua que habían mantenido durante un año a raíz del fallido golpe de Estado del 23-F y reiniciar sus actividades. Una parte de quienes tomaron aquella decisión se pasan ahora a las filas de los milis.

Después de la celebración de la VIII Asamblea, que significó la culminación del distanciamiento con Euskadiko Ezkerra, los polimilis no han llegado a realizar un debate sobre el futuro de la organización en las nuevas condiciones políticas -falta de un punto de referencia político, Gobierno socialista, la escisión del sector VII Asamblea-, por lo que las mencionadas lagunas han perpetuado su crisis interna hasta provocar el descontento de un sector que, al parecer, ha optado por abandonar la mencionada organización.Tras las pasadas elecciones generales, el grueso de ETA Políticomilitar, que en un principio se mostró expectante "ante la posibilidad de que el nuevo Gobierno socialista realice una política de cambio en el País Vasco", ha coincidido ahora también en el endurecimiento de su actitud, que no han ocultado frente al nuevo Gobierno.

Sin embargo, la ausencia de debate acercade cuál iba a ser la línea que iban a desarrollar, después de haber decidido no conceder tregua alguna al nuevo Gobierno, les ha conducido, en la última época, a la única dinámica de realizar acciones violentas que le sirvieran de apoyo a su infraestructura.

La falta de una cobertura política tras su ruptura con Euskadiko Ezkerra, la escisión de los miembros de la VII Asamblea que optaron por abandonar definitivamente la lucha armada y la separación del sector de Nueva Izquierda del partido de Euskadiko Ezkerra han sido factores que no solo han tenido su reflejo en la dinámica interna de los poli-milis, sino que ha contribuido a ahondar su crisis.

Casi sin discutir, tras el "fracaso" del secuestro perpetrado contra el industrial Saturnino Orbegozo, se han puesto de manifiesto dos posturas claramente diferenciadas en el seno de la dirección de ETA Político-militar. Todos coincidían en criticar la línea de Euskadiko Ezkerra, que, en su opinión se ha ido escorando progresivamente "hacia la socialdemocracia. Sin embargo, en el seno de los poli-milis se han ido perfilando en las últimas semanas dos alternativas a la antigua concepción de la mencionada organización político-militar.

Mientras un sector de la dirección, al parecer mayoritario, se muestra partidario, según las directrices de la VIII Asamblea, de iniciar un proyecto de convergencia de la izquierda nacionalista, en el que podrían confluir sectores críticos de Herri Batasuna y Euskadiko Ezkerra, otro grupo menos numeroso, receloso de la viabilidad de una organización armada sin la cobertura de un partido político, prefiere integrarse en ETA Militar.

Apelación francesa contra la excarcelación del 'etarra' Txomin

El ministerio fiscal francés ha apelado contra la excarcelación del dirigente de ETA Militar Domingo Iturbe Abásolo, alias Txomin, decidida ayer por el juez de instrucción de Bayona.Iturbe Abásolo, que fue detenido en Bayona el 13 de junio de 1982, acusado de "tenencia ilícita de armas" y "asociación para la delincuencia", permanecerá en prisión hasta tanto se decida la apelación presentada ayer contra su puesta en libertad.

El recurso está ahora en manos de la cámara de acusación del Tribunal de Apelación de Pau, competente en este caso, que cuenta con el plazo de un mes para pronunciarse sobre la excarcelación de uno de los máximos dirigentes etarras, Txomin Abásolo.