Martín Villa escribirá un libro sobre la transición política
Rodolfo Martín Villa, vicepresidente del Gobierno con Calvo Sotelo y tres veces ministro -de Gobernación, Interior y Administración Territorial- en los últimos años, comenzará a escribir en breve un libro sobre la transición política. Será publicado por la editorial Planeta y no aparecerá al menos hasta el verano. "No se trata de unas memorias, ni escribo para exculparme ante la historia. Hay cosas que, por prudencia, debe uno callar cuando ocupa un puesto de responsabilidad. Pero ahora creo que tengo la obligación moral de que las sepan los españoles", afirma.
Presidente de UCD de León y diputado por esta cirscunscripción hasta el lunes -"he sido víctima de la política autonómica que yo mismo impulsé desde el Gobierno en los últimos años y por eso, honradamente, hube de dimitir"- no comenzará a redactar el libro hasta decidir su futuro inmediato. Ingeniero industrial del Cuerpo de Ingenieros de Hacienda, en excedencia desde 1964, Martín Villa es funcionario destinado en la Delegación del Ministerio de Hacienda de Madrid. Sin embargo, es prácticamente seguro que se integrará en las próximas semanas a una importante empresa privada.El libro arranca en las semanas anteriores a la muerte de Franco (20 de noviembre de 1975) y concluye en la noche del 28 de octubre de 1982, fecha de las últimas elecciones legislativas en las que el partido centrista obtuvo únicamente doce actas de diputado de las 167 con que contaba en la legislatura anterior.
Un capítulo clave estará dedicado a Adolfo Suárez, "como es natural, porque es, con diferencia, la persona clave en estos años y no ha sido muy bien tratada últimamente. Voy a contar también con la mayor sinceridad que permita el respeto a las personas todos los episodios importantes y que a mí me ha tocado vivir desde dos ministerios clave: Gobernación (luego Interior) y Administración Territorial. Desde la detención de Carrillo en las Navidades de 1976 hasta las más que notables diferencias entre los miembros del Gobierno y del partido en los últimos meses, especialmente en el tema de las elecciones"
La principal dificultad con la que se encontrará Martín Villa a la hora de redactar este libro será la falta de documentación. "Del Ministerio del Interior me llevé solamente un papel, el de la legalización del PCE, porque lleva mi firma y porque es probablemente el punto de inflexión en estos siete años de transición ¡unto con otros acontecimientos especialmente dolorosos para mí y, supongo que para todos, como la especie de invasíón de Rentería por miembros de la Policía Nacional. Lo demás tendré que fiarlo a la memoria, aunque siempre he conservado la costumbre de guardar todas las agendas que he utilizado.
Tres personajes saldrán especialmente bien parados de las memorias: Josep Tarradellas, Santiago Carrillo y Juan Ajurriaguerra. De Tarradellas supo que era un número uno cuando, tras entrevistarse con Suárez por primera vez, recién llegado aquél del exilio, y haber resultado un desastre la conversación, dijo a los periodistas que le esperaban a la puerta que la entrevista había sido francamente positiva y que había encontrado en Suárez una persona con una sensibilidad extraordinaria hacia los problemas autonómicos. En Santiago Carrillo reconoce un auténtico animal político "como lo ha demostrado durante estos años. Llegamos a ser buenos amigos, hasta el punto de que, en un crucero que hacía yo con mi familia en 1980, por el Mediterráneo, vino a buscarme a un puerto yugoslavo con su mujer para pasar unas horas juntos, ante el pasmo general de los compañeros de crucero". De Ajuriaguerra lamenta su muerte en una época clave para el futuro del país vasco. "Hubiera sido el Tarradellas de Euskadi".
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