El arquitecto José de Senillosa reclama el pago de un proyecto de Dalí

El arquitecto José de Senillosa i Cros planteó ayer ante la sala segunda de lo Civil de la Audiencia Territorial de Barcelona una demanda contra Peter Moore, ex secretario de Salvador Dalí, reclamándole el pago del proyecto de una escuela de pintura, que debía de ser construida en Cadaqués. La reclamación del arquitecto, hermano del ex diputado catalán Antonio de Senillosa, se eleva a 576.962 pesetas.La historia de este procedimiento judicial se remonta a 1980, cuando José de Senillosa, a través del Colegio de Arquitectos de Barcelona, planteó ante el Juzgado de Primera Instancia número uno una demanda de mayor cuantía contra el británico Peter Moore. En octubre de 1981 este juzgado de Barcelona dictó una primera sentencia desestimando la demanda del arquitecto José de Senillosa, al considerar que no se habían cumplimentado una serie de requisitos burocráticos. El técnico y el Colegio de Arquitectos decidieron presentar el recurso, trámite que se celebró ayer a las 11,30 de la mañana, y que quedó pendiente de sentencia.

La polémica judicial entre el ex secretario y el arquitecto esconde también un curioso episodio de la vida de Salvador Dalí, que sucedió en 1976, cuando Peter Moore proyectó construir en una de las colinas de Cadaqués una escuela de pintura. El británico soñaba levantar un edificio de tres o cuatro plantas, que mirasen a la bahía, y que albergasen no sólo las aulas de la escuela, sino también una residencia en la que se vivirían alumnos venidos de todas las partes del mundo, ávidos de conocer los secretos de la pintura de Salvador Dalí.

El proyecto había sido bendecido por el propio Salvador Dalí y por la mayor parte de los pintores afincados en Cadaqués, a los que se les habían asegurado pingües beneficios dando clases en esta escuela. Se había incluso planeado la posibilidad de que cada verano al finalizar el curso, el propio Salvador Dalí entregara a los alumnos un diploma sellado con su firma, acreditativo de su estancia de la escuela de Cadaqués. Aseguraba Peter Moore que habría cola por apuntarse al centro y que centenares de alumnos acudirían de Europa y sobre todo de los Estados Unidos.