Raúl Morodo anunció anoche su dimisión como rector de la Universidad Menéndez y Pelayo
Raúl Morodo, rector de la Universidad Internacional Menéndez y Pelayo, de Santander, anunció anoche que la próxima, semana presentará su dimisión como principal directivo de esta entidad cultural, a cuyo frente ha estado justamente tres años. Morodo hizo este anuncio antes de que en un acto público Víctor Merino le entregara el Premio Molino de Oro que una comisión ha concedido a la mencionada universidad internacional. Morodo hizo balance de sus tres años al frente de la UMP y destacó que esta institución, que en 1982 cumplió cincuenta años, ha avanzado en el último trienio en el proceso de la reconciliación cultural española.
El acto se convirtió en un homenaje a Morodo, de quién el alcalde de Madrid dijo que era "la antítesis de toda la pedantería", "un gran administrador, que sin estar en continuo trajín lo mueve todo para bien y sabe hacer muchas cosas con un sentimiento de gran apertura intelectual". El teniente general Manuel Gutiérrez Mellado, ex vicepresidente de Gobierno, que también habló en el acto, expresó el ambiente de la noche diciendo que era "una noche alegre porque se rendía homenaje a la universidad, pero también triste porque va acompañada de la noticia de que se va a ir Raúl".
Discurso del ministro
El ministro de Educación, José María Maravall, expresó su admiración por la tarea de gestión llevada a cabo por Morodo, subrayó el carácter ejemplar que ha tenido la conducción de, esta tarea y dijo que "siempre la Universidad Menéndez y Pelayo ha estado contra la seudocultura del oscurantismo". El ministro anunció para esta universidad internacional todo el apoyo que precise de su departamento. También hablaron Juan Luis Cebrián, director.de El PAIS, quien puso énfasis en el criterio expresado por Morodo acerca del objetivo de reconciliación intelectual que había cumplido la universidad, adelantada del cambio, porque en sus pasillos se han podido ver al mismo tiempo al filósofo Agustín García Calvo y al profesor Gonzalo Fernández de la Mora.Raúl Morodo, que en privado anunció que ahora se retiraría "a unos discretos cuarteles de invierno", recordó al principio de su discurso la frase con la que el rey Juan Carlos I definió en 1980 la significación de la UIMP, como "fuero abierto de cultura", plural y progresista.
"Justamente hace tres años, el Gobierno del presidente Adolfo Suárez, a propuesta del ministro y viejo amigo Luis González Seara, me nombró rector de esta institución", dijo Morodo. Para él, el primer año de su gestión fue indicativo del respeto a la herencia ideológica del. espíritu con que se fundó la universidad hace cincuenta años. A partir de ese espíritu de libertad y humanismo progresista se avanzó en la reconciliación cultural española, integrando y no excluyendo. Por eso se establecieron los premios Giner de los Ríos, Pedro Salinas, Blas Cabrera y Alfonso Castelao, "hombres ilustres de nuestra cultura, en el marco de una institución que lleva el nombre de Menéndez y Pelayo".
Dinamizar la cultura
Que los premios recayeran el pasado año en Alberti, Bergammi, Tierno, Aranguren, Nicolás Cabrera e Isidro Parga expresa "el reconocimiento a su valía intelectual y a su actitud en momentos difíciles de nuestra cultura de hibernación". Morodo cree que la UIMP "ha pretendido coadyuvar a la dinamización, con crítica y autocrítica, de nuestra cultura actual y de transición" y ha profundizado en la problemática interregional e internacional. En tres años han participado en los cursos, que han tenido como base tradicional el palacio santanderino de La Magdalena, más de 3.000 conferenciantes en el marco de mas de doscientos cursos y seminarios.
