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La nueva ofensiva de ETA

La policía mantiene la convicción de que el secuestro de Miguel Ignacio Echeverría es obra de ETApm-VIII Asamblea

Fuentes policiales de toda solvencia han reiterado a este diario su convicción de que ETA Político-Militar VIII Asamblea es la autora del secuestro de Miguel Ignacio Echeverría, pese a los repetidos desmentidos de dicha organización terrorista. Esta, por otro lado, ha vuelto a cobrar el impuesto revolucionario en el País Vasco, según las citadas fuentes, después de que la organización terrorista decidiera hace cerca de cinco años conseguir fondos por otros medios, "ante el grado de discriminación" a que había llegado el cobro del impuesto y ante las "expectativas autonómicas".

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ETA pm-VIII Asamblea, que actualmente sufre una grave crisis económica, cuenta con cerca de doscientos miembros y parece posible que una gran parte de ellos proyecten integrarse en la rama militar de ETA.A pesar de que la organización terrorista ETApm ha desmentido en dos ocasiones su participación en el secuestro del joven guipuzcoano Miguel Ignacio Echeverría, las mencionadas fuentes mantienen la tesis de que el acto terrorista es obra de ETApm y que sus mentís forman parte de la estrategia que la organización ha seguido en los últimos años. En este sentido, añadieron que este secuestro es algo "anómalo, que se sale de los cauces normales", pero afirmaron estar convencidos de que es ETApm la organización que está detrás de este acto terrorista.

Según las mencionadas fuentes, este secuestro se encuadra dentro de una amplia ofensiva que pretende llevar a cabo ETApm ante la falta de recursos económicos para financiarse, hecho por el que, en contra de la decisión que tomaron, han vuelto a cobrar el impuesto revolucionario.

Los octavos han radicalizado sus posiciones inmediatamente después de que varios altos dirigentes de la organización decidieran abandonar la misma, y evidentemente dejar la lucha armada. Tras la autodisolución de esta facción de ETA Político-militar -la VII Asamblea-, los octavos hicieron público un comunicado en el que señalaban que su postura estaba motivada porque "el Estatuto de Autonomía de Guernica, apoyado en su día por el conjunto de la organización político-militar de ETA, no es ya una alternativa eficaz" para lo que ellos definen como "el afianzamiento de un nivel aceptable de autogobierno".

Por su parte, los ex militantes de la autodisuelta ETA Político-Militar VII Asamblea, han hecho pública recientemente su protesta ante una carta que han recibido de los octavos, en la que éstos les amenazaban directamente si regresaban al País Vasco antes de haberse entrevistado con la dirección de este sector de los polis-milis que sigue en la práctica terrorista. La amenaza de los 'octavos' se basa en la acusación de que los autodisueltos están colaborando con la policía española, término absolutamente desmentido por estos últimos.

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La organización

Los cuatro máximos dirigentes de ETApm-VIII Asamblea son en la actualidad, según fuentes policiales, Jesús Abrisketa Corta, alias Txutxo, responsable del aparato militar de la organización; Torquiza Iturriaga, jefe de propaganda; Arnaldo Otegui Mondragón, responsable de la sección logística, y José Larrechea Goñi, jefe de conexiones internacionales. En el aparato militar de la organización terrorista se encuentran como miembros importantes, después de Abrisketa Corta, Izaskun Arrazola Mallona y Juan Aguirre Aurrecoechea.

Jesús Abrisketa, nacido en Miravalles (Vizcaya) hace 33 años, casado y con dos hijos, es considerado por la policía como el máximo dirigente de ETApm. De profesión analista químico, Abrisketa fue detenido, junto con Mario Onaindía, el 9 de abril de 1969 y procesado en el sumario 31/1969, del célebre consejo de guerra de Burgos. Estaba acusado del robo a punta de pistola de doscientos kilos de dinamita y de haber participado en la reunión de liberados de ETA en la que se decidió la colocación de una serie de bombas coincidiendo con el Aberri Eguna de 1969.

Condenado a 62 años de prisión, abandonó la cárcel de El Puerto de Santa María, en Cádiz, con la amnistía de 1977, y pocos meses después se exilió a Francia, donde volvió a encuadrarse en las filas de la organización terrorista. Hace un año resultó gravemente herido en el sur de Francia en un accidente de automóvil, a consecuencia del cual sufre una débil cojera.

Abrisketa es el único miembro histórico que continúa en ETApm, ya que el resto formaba parte de la autodisuelta VII Asamblea. En los debates tras los que se cristalizó la escisión en ETApm, Abrisketa defendió la tesis de que la tregua en la lucha armada había sido un fracaso y de que la resolución de los problemas pendientes -LOAPA, la salida de los presos y la incorporación de Navarra a la comunidad autónoma vasca- exigían la vuelta a las armas. Abrisketa afirmó recientemente que el triunfo electoral del PSOE no traería el establecimiento de la tregua, aunque llevaría a ETApm, a replantearse el tipo de acciones para, posteriormente, expresar que un Gobierno socia lista sería más duro con las organizaciones armadas, a las que sometería a un cerco político y policial mayor.

Abrisketa fue detenido en Francia el 13 de octubre del pasado año, acusado de tener en su poder documentos en los que se solicitaba el denominado impuesto revolucionario, así como por poseer informaciones sobre los movimientos de los grupos de intervención de la gendarmería francesa especializados en la lucha antiterrorista. Días más tarde fue puesto en libertad por un acuerdo de la corte de apelación de Pau.

Izaskun Arrazola Mayona, de veintiocho años, fue detenida en San Sebastián en octubre de 1979, junto a otros miembros de un comando de ETApm que tenían proyectado volar un edificio en plena campaña del referéndum. Izaskun Arrazola se fugó de la prisión de Martutene, en San Sebastián, en enero de 1980, y volvió al sur de Francia, donde siguió actuando dentro de la organización terrorista.

Arnaldo Otegui Mondragón, jefe de la sección logística de ETApm, era un experto en burlar controles policiales y participó en numerosas acciones de la organización, entre ellas los secuestros de Javier Rupérez y Gabriel Cisneros.

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