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Reportaje:

Los cotillones mas caros tienen las mesas reservadas desde hace más de una semana

Cenar por más de 8.000 pesetas resulta casi imposible hoy en Barcelona. No porque no haya cenas más caras, sino porque los locales que las ofrecen han puesto el cartel de no hay billetes. En el hotel Ritz aún se puede encontrar alguna mesa, pero los tres casinos catalanes tienen asegurado el completo desde hace una semana.

Divertirse en Nochevieja puede no ser caro. En la plaza de Catalunya, sin ir más lejos, se ha organizado un reveillon gratuito, con la colaboración de los residentes de la zona y el ayuntamiento de la ciudad. En otros lugares hay fiestas baratas. El Instituto de Bachillerato de Cornellá, por ejemplo, tendrá una donde la entrada es de doscientas pesetas. Pero estos sitios, aunque al final estarán a rebosar, no atraen a los precavidos. O será que los precavidos son, no se sabe si casualmente, los que tienen dinero. El caso es que los cotillones caros, desde una perspectiva de economía media, están reservados, algunos, como los tres casinos catalanes, con el lleno asegurado desde hace una semana, y otros casi a tope. El precio de la cena y fiesta en un casino es de 10.000 pesetas por persona. Es el mismo precio del hotel Ritz, si uno se aviene a tomar un cava de la tierra. Si se prefiere regar los platos y entreplatos con champaña francés, el suplemento es de 4.000 pesetas.Los casinos han organizado todo un festival para arropar la cena y el cambio de guarismo. Mónica Randall, en Perelada; Tina Sainz y Luis Arribas Castro, en Sant Pere de Ribes, y Silvia Tortosa, en Lloret, actuarán como presentadores de la fiesta.

Los menús incluyen, casi todos, langosta y carne, solomillo en más de un 50% de los casos consultados. Tal es el caso de la Hostería de Mar de Peñíscola, lugar al que se desplazarán bastantes barceloneses. El precio de este local es ligeramente inferior al de los casinos: 8.000 pesetas por persona, lo que da derecho a un menú compuesto, entre otras cosas, por, salmón, langosta, langostinos, solomillo, macedonia de frutas, turrón, barquillos y chocolate con churros en la madrugada.

El chocolate con churros es la gran innovación de este año. La ofrecen casi todos los grandes restaurantes provistos de espectáculo y baile y no pocas salas de fiesta. Entre ellas, Studio 54, que presenta la novedad de celebrar el cambio de año a las 0.54 horas y pedir a sus clientes que vistan traje negro-oro o elegante. Ciros también ha variado la hora de las uvas. Se tomarán coincidiendo con la hora solar: la 01.00 de la noche.

Un espectáculo porno, como el del New York, cuesta 1.800 pesetas por persona. Sus gerentes no cuentan con llenar a base de reservas, porque "este tipo de salas se llena siempre a última hora, cuando la gente se acuerda de que hay que salir a alguna parte". El precio incluye media botella de champaña. Diez duros más cuesta el espectáculo de La Cova del Drac, que ofrece música en vivo, un animador y un bailarín de claqué.

Las verbenas populares tendrán su centro en la plaza de Catalunya, gratis. Pero otras pueden localizarse en diferentes puntos. La ya citada del Instituto de Bachillerato de Cornellá cuenta con la actuación de la Pacific Band. El Centre Civic Casal de Hostafrancs, con la actuación de Sanfaina y Ledens. El precio: quinientas pesetas.

Entre la nada y las 14.000 pesetas del Ritz, una amplia gama: 8.000 pesetas en el Expo Hotel, con cena, y 6.000 sin cena; 8.500 en el restaurante Orotawa; 5.500 pesetas en Sirio B; 3.500 en Ciros; 3.000 en No; 2.700 en Planeta 2001 y 1.000 pesetas en Rialto, aunque en este último local el precio era orientativo, "el definitivo lo decidiremos posiblemente esta tarde".

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