España y el comercio internacional de armas

España se ha visto implicada en los últimos años en casos conflictivos del comercio internacional de armas. Ya en 1978, el Sindicato Libre de la Marina Mercante, afirmaba que el 90% del tráfico mundial de armas pasa por Canarias, principalmente procedente de países europeos con destino a los países compradores en Africa o América.Esta denuncia se hizo a raíz del caso Allul, en septiembre de 1978, un mercante español que se vio envuelto en un turbio asunto de cargamento de 2.800 rifles, propiedad regresó a Zeebrugge, donde descargó los tres contenedores de armas. A raíz del caso Allul, en marzo de 1979 el Gobierno acordó abrir una investigación sobre las presuntas irregularidades de empresas y personas españolas en el tráfico internacional de armas. La Fiscalía General del Estado inició actuaciones contra Barreiros Hermanos Internacional S. A., por supuesta falsificación de documentos en el tráfico de armas que es realizado por esta compañía española. Nuevamente, el nombre de España apareció relacionada en un extraño capítulo del tráfico de armas, en marzo de 1979, al ser retenido en Francia un barco en el puerto de Cherburgo, con un cargamento de 321 toneladas de armas en su interior, cuyo destino final debía haber sido Cádiz.

Por otra parte, el pasado mes de julio, el semanario alemán Der Spiegel, publicaba una información sobre la venta de armas alemanas a Argentina a través de España, sin respetar las garantías ofrecidas en el certificado, información puntualizada por el Ministerio español de Asuntos Exteriores en el sentido que las armas vendidas a Argentina en 1979 no estaban sujetas a certificado de destino alguno, que en aquella fecha no se exigía. En los los últimos años surgieron con cierta periodicidad informaciones sobre la venta de ametrallador antiáreas RH 202 a Argentina, a través de España.