En la enseñanza pública faltan casi 6.000 profesores de religión, afirma Elías Yanes

Un número de 5.680 aulas de EGB, BUP y formación profesional en los centros públicos, que suponen el 18,5% del total, no disponen de profesorado para impartir las clases de religión y moral católica a pesar de existir peticiones de los padres en tal sentido, según los datos facilitados ayer por Elías Yanes, arzobispo de Zaragoza y presidente de la comisión episcopal de enseñanza, a la asamblea plenaria de la Conferencia Episcopal Española, reunida en Madrid.

El resto de las aulas de enseñanza pública se encuentran satisfactoriamente cubiertas con profesores de religión de plantilla -16.429 (53,7%)- o son atendidas en situación precaria por personal docente ajeno a la plantilla del centro -8.500 (27,8%)-.Elías Yanes atribuyó esta situación a la falta de dotación presupuestaria en las previsiones del Ministerio de Educación y Ciencia. El arzobispo de Zaragoza reconoció que muchos profesores no quieren impartir la asignatura por problemas de conciencia o porque, a partir de cierto grado, se consideran insuficientemente preparados. Pero otro aspecto de la cuestión, añadió el presidente de la comisión de enseñanza, es que resulta muy dificil comprometer al profesorado sin una compensación retributiva. "Lo que no podemos es garantizar ya más profesores para impartir la materia sin retribución alguna, como hemos venido haciendo en muchos casos", aseguró Yanes, que negó cualquier responsabilidad de la Iglesia en la falta de personal docente adecuado para las clases de religión, y se comprometió "a facilitar el profesorado preciso, titulado y capacitado, en cuanto el Ministerio de Educación disponga de presupuesto suficiente para ello".

Además, Yanes manifestó ante la Conferencia que la consideración de la religión católica en el conjunto de materias que se imparten en el ciclo superior (6º, 7º y 8º) resulta insatisfactoria y no respeta el carácter de "asignatura fundamental" que le asignan los vigentes acuerdos Iglesia-Estado, porque se le dedican sólo noventa minutos semanales. Los obispos desearían que esta duración semanal se prolongue a dos horas, como ocurre en numerosos países donde existe la asignatura de religión, o al menos se organicen los noventa minutos en dos sesiones".

Demanda masiva de clase de religión

Yanes negó, por otra parte, que la exposición de estos datos ante la Conferencia Episcopal haya pretendido revestir carácter de advertencia o polémica con la nueva Administración, porque, en todo caso, aluden a responsabilidades del anterior Gobierno. "No tenemos ninguna prevención frente a las nuevas autoridades educativas. Estamos expectantes y dispuestos a establecer el diálogo sin ningún recelo, al objeto de completar el desarrollo de los acuerdos Iglesia-Estado y de la Constitución en esta materia".Las estadísticas que manejan los obispos sobre la demanda de enseñanza religiosa católica son abrumadoras. Más del 98% de los padres de alumnos en centros públicos de EGB de Andalucía quieren para sus hijos clases de religión, mientras la cifra es de 95% en Madrid, 97% en Galicia, más del 98% en Euskadi y más del 99%. en Ciudad Real. En BUP y FP, la cifra se reduce entre diez y quince enteros en las zonas citadas, de las que existen datos definitivos.

Otro tema abordado por la Conferencia Episcopal, además del viaje del Papa -cuyo análisis podría prolongarse en la siguiente asamblea plenaria- fue el de las fiestas católicas. La asamblea aprobó un documento que establece seis fiestas concertadas con el Ministerio de Trabajo, más otras cinco que pueden ser sustituidas en su ámbito por las comunidades autónomas. Los obispos tratan de garantizar de este modo que las fiestas no se trasladarán a los lunes.