_
_
_
_
gente

John Burney

desapareció misteriosamente de la localidad de Helena (Arkansas) el 11 de junio de 1976. Al día siguiente se encontró su automóvil, pero de él nunca más se supo, y con el tiempo se le dio por muerto. Ahora resulta que Burney no murió, sino que emigró con otro nombre a Cayo Largo, una de las islas que prolongan la península de Florida. El paradero del antes próspero arrocero del delta del Misisipí se descubrió mediante la reclamación de un pago a una compañía de Miami. En Estados Unidos las compañías aseguradoras obtienen con frecuencia resultados más espectaculares en sus investigaciones que la propia policía. Se descubrió que Burney era ahora John Bruce, que vivía con otra mujer, Cathy Bruce, de quien tomó el apellido y con quien tiene una hija. De su anterior vida quedó otra esposa, dos hijos, un seguro de vida y un negocio en bancarrota.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_