Ramalho Eanes reitera en Argel la neutralidad de Portugal ante el conflicto del Sahara

El presidente de Portugal, Antonio Ramalho Eanes, inició ayer una visita oficial a Argelia, la primera de un jefe de Estado portugués, destinada a reforzar la cooperación económica entre los dos países y revisar el magro contexto de sus relaciones políticas. El dirigente portugués ha señalado que su país se mantiene neutral a propósito del conflicto del Sahara y se pronuncia en favor del derecho a la existencia de todos los pueblos de Oriente Próximo.

La primera visita oficial a Argelia de un presidente portugués arroja escaso interés en Argel, a la luz de los comentarios mediatizados de la Prensa gubernamental argelina. Los medios citados han criticado a los nostálgicos de la derecha portuguesa de no haber sabido asimilar el apoyo prestado por Argelia a los movimientos de liberación de las antiguas colonias de Africa portuguesa.En el terreno político, no existe ningún contencioso entre Argelia y Portugal, por lo que la visita de Eanes no debe rebasar, en principio, el cauce protocolario. El plato fuerte de las conversaciones que mantendrá en Argel el presidente portugués concierne a las relaciones comerciales, deficitarias para los argelinos.

Argelia importa de Portugal productos textiles y le vende derivados de la minería, en el marco de un acuerdo comercial que se remonta a 15,77, renovado el año pasado, tras la reunión de una comisión mixta instituida para promover el comercio y la cooperación cultural.

En dos temas sensibles para la diplomacia argelina, el conflicto del Sahara Occidental y el problema palestino, el presidente Eanes dio pruebas de gran cautela al señalar a los medios informativos que Portugal considera que la autodeterminación del pueblo saharaui debe realizarse conforme a las reglas establecidas por la comunidad internacional. Con relación a Oriente Próximo manifestó que "Portugal no puede jugar más que un papel menor en el proceso político llamado a solucionar el conflicto de esta región.

Los argelinos reprochan, de todas maneras, a Lisboa el haber adoptado una actitud negativa en el conflicto palestino, al haber autorizado la utilización de la base aérea de Lajes, en las Azores, por parte de la aviación norteamericana para apoyar logísticamente a Israel durante los dos últimos grandes conflictos militares contra el mundo árabe., En este sentido, Eanes ha señalado que el empleo eventual de esa base está sometido a una autorización especial, sin descartar que pueda ser utilizada de nuevo en caso de otra crisis árabe-israelí.

Para Eanes esta visita a Argelia debe ser situada. en el contexto de la voluntad de Lisboa de reforzar lazos con los países árabes y africanos para que permita discutir, además, la construcción de un nuevo orden económico internacional, que forma uno de los puntales de la política exterior argelina, para situar el fondo de las diferencias que separan el mundo occidental desarrollado del llamado Tercer Mundo, en vías de desarrollo.