En 1982 se han producido mensualmente 5.602 colocaciones menos que en 1981, según un estudio de Comisiones Obreras

Durante los nueve primeros meses de 1982 se ha producido una media mensual de 5.602 colocaciones menos que en 1981, a pesar de las medidas de fomento de empleo recogidas en el Acuerdo Nacional sobre Empleo (ANE). De continuar esta tendencia, a finales de año se habrán suscrito a través del Instituto Nacional de Empleo (INEM) 67.224 contratos menos que en 1981, según se desprende de un estudio realizado por el gabinete técnico de CC OO. Por otra parte, las colocaciones registradas mediante la utilización de los programas de fomento de empleo también han disminuido en forma importante.

De acuerdo con el citado estudio, en 1980 se realizaron un total de 1.473.496 colocaciones a través del Instituto Nacional de Empleo, lo que da una media mensual de contrataciones de 122.791. En 1981 estas cifras se ampliaron a 1.682.394, a lo largo de todo el año, con una media mensual de 140.199. Y por lo que se refiere a 1982, hasta septiembre se lían producido 1.211.373, lo que da una media de contratos por mes de 134.597.Los datos resultan más significativos si se tiene en cuenta que las nuevas colocaciones realizadas a través de los programas de fomento del empleo potenciados con la firma del Acuerdo Nacional sobre Empleo, en lugar de haber aumentado como consecuencia de las mayores facilidades introducidas en los decretos de julio, han disminuido en número muy considerable.

Caída en la contratación

Hasta el mes de julio de 1981, fecha en la que ponen en marcha los nuevos decretos -de contratación temporal, a tiempo parcial, en prácticas y para la formación y para determinados grupos-, existían dos programas que incentivaban la contratación de jóvenes y la de perceptores del seguro de desempleo. De acuerdo con los datos aportados en el citado estudio, fueron más utilizados éstos últimos que los que vinieron a. sustituir en julio de 1981. En 15,80, y sólo con los dos programas entonces existentes, se realizaron 516.280 colocaciones. Es decir, 43.023 mensuales. Al año siguiente en el que se pusieron en marcha los nuevos programas del ANE, se produjeron 470.296 contratos -39.191 por mes-.

La caída ha sido mayor en 1982, año en el que se esperaba una mayor utilización de ese tipo de contrataciones en función de las mayores facilidades que, sobre todo en materia de contratación temporal daba la refundición de los decretos de julio de 1982. En este año, hasta septiembre, se habían suscrito 299.000 contratos -33.325 al mes-. Es decir, que en comparación con 1980, en 1982 se han realizado mensualmente casi 10.000 colocaciones menos, acogiéndose a los programas especiales.

El citado estudio subraya que las modificaciones introducidas en los programas de fomento de empleo han provocado un descenso continuado en este tipo de contrataciones, pasando de representar el 35% del total de las colocaciones realizadas en 1980 al 28% en 1981 y sólo al 25% en 1982. La mayor caída se registra precisamente en el mes de julio, coincidiendo con la puesta en marcha de los nuevos programas derivados del Acuerdo Nacional sobre Empleo. Y aunque en un principio podría deberse a la confusión creada por el cambio, lo cierto es que en los meses posteriores no le remonta del todo esa tendencia, situándose actualmente en niveles inferiores a los conseguidos en 1980.

Aunque el documento señala que "no se trata de hacer un canto a las bondades de los programas derogados con los decretos de julio", se reconoce, no obstante, "el fracaso en sí de los programas, la escasa imaginación en su elaboración y la posición ambigua y cambiante del Ministerio de Trabajo en esta materia". Todo ello, a juicio de los autores del trabajo, debe servir para corregir posiciones en una negociación futura.

Al mismo tiempo, se indica que los programas derogados se prestaban al fomento de posibles acciones indirectas de fraude. Así, una empresa, dice el documento, despedía con indemnización muy inferior a la que le hubiera correspondido al trabajador, utilizando el señuelo de una nueva contratación, ya con carácter temporal y mediante contrato bonificado por ser trabajador subsidiado.

Decretos de julio

Por lo que se refiere exclusivamente a la evolución registrada en las colocaciones realizadas a través de los programas de fomento de empleo recogidos en los decretos de julio de 1981, entre agosto de ese año y septiembre de 1982 se registraron 406.951 contratos acogidos a los mismos, lo que supone el 21,8% de las colocaciones totales.

En el mencionado período se registraron 239.174 contratos temporales, es decir, el 58,8% del total de los contratos suscritos bajo alguna de las nuevas modalidades. A tiempo parcial se realizaron 24.488 colocaciones (6%); contratos en prácticas y para la formación, se registraron 26.696 contratos (6,6%); para determinados grupos de trabajadores se suscribieron 112.316 (27,6%). El resto son colocaciones producidas en otro tipo de programas de carácter territorial o mediante conciertos especiales, y en número muy reducido.

De acuerdo con estos datos, los contratos temporales han. sido los más utilizados y los de tiempo parcial no lo han sido tanto como cabía esperar. El documento destaca que habría que hacer un notable esfuerzo para lograr extraer de los mismos todas las posibilidades de fomento de empleo que este tipo de contrataciones posee. La misma consideración hace sobre los contratos en prácticas y para la formación que no han sido empleados en el grado que habría de desearse.

Respecto a este último punto, el documento del gabinete técnico de CC OO subraya que el acuerdo CEOE-INEM sobre contratos en prácticas y para la formación ha tenido nula -"cuando no negativa"- incidencia, por cuanto que a partir de la firma del citado acuerdo, el porcentaje de este tipo de contratos se sitúa por debajo del registrado en el año 1981. Actualmente, el porcentaje de los contratos en prácticas y para la formación está en el 5,9% del total de los programas, mientras que en 1981 fue del 6,8% y en los cuatro primeros meses del año se situó en el 7,3%.