Procesado el teniente coronel Fernández Hidalgo por supuesta implicación en la conspiración del 27 de octubre

El teniente coronel de Infantería Juan Fernández Hidalgo ha sido procesado como presunto autor de un delito de conspiración para la rebelión, tipificado en el código castrense, según providencia dictada por el juez togado de la I Región Militar, coronel José Muñoz Sánchez, dentro de las atribuciones que le competen como instructor de la causa 200/82, abierta por la última intentona golpista del 27-O.

A raíz de su descubrimiento, el 2 de octubre, la autoridad competende dispuso el traslado fuera de Madrid de los condenados del 23-F y la incomunicación de alguno de ellos al que se consideraba en relación con los hechos, como fue el caso del general Jaime Milans del Bosch, que sin embargo nunca llegó a prestar declaración en la referida causa. Precisamente ayer el gobernador militar del Campo de Gibraltar, Rodríguez de Viguri, dio traslado a Milans de una comunicación del capitán general de Sevilla por la que se levantaban las restricciones sobre visitas y comunicaciones aplicadas desde el pasado 3 de octubre.En esa misma causa ya se encontraban procesados desde el 7 de octubre los coroneles de Artillería José Muñoz Gutiérrez y Jesús Crespo Cuspinera y el teniente coronel también de Artillería José Crespo Cuspinera. Los medios oficiales del Centro de Relaciones Informativas y Sociales de la Defensa (CRISDE) informaron del nuevo procesamiento con 24 horas de retraso sin facilitar más detalles que la entrega del auto por el presunto delito de conspiración para la rebelión militar y el decreto judicial de prisión preventiva.

El CRISDE ocultó en sus notas que el procesamiento del teniente coronel Juan Fernández Hidalgo se produce en la causa referida 200/82 abierta por la citada intentona golpista abortada por los servicios del CESID el 2 de octubre, con 25 fechas de anticipación sobre el día D. Tampoco facilitó el CRISDE ninguna mención sobre los antecedentes del jefe procesado, del defensor encargado de su representación, ni del lugar donde la autoridad judicial ha dispuesto que sea recluído. A última hora de la tarde de ayer se supo que el procesado se hallaba en un centro militar de la Il región con sede en Sevilla y que no se descartaba su traslado a Madrid en los próximos días para facilitar la tarea del instructor del sumario.

La agencia Europa Press cita fuentes militares oficiosas para asegurar que el teniente coronel Juan Fernández Hidalgo, destinado en la zona de reclutamiento y movilización número 23 de Badajoz, se trasladó en varias ocasiones a Madrid para prestar declaración ante el juez togado coronel José Muñoz Sánchez, a requerimiento de este último. El nombre del teniente coronel ahora procesado aparece mencionado en las declaraciones de alguno de los tres jefes de Artillería en prisión preventiva por la intentona del 27-O. La agencia asegura que en uno de sus desplazamientos a la capital de España estuvo previsto un careo, con el también teniente coronel José Crespo Cuspinera, pero que dicha actuación judicial no se llevó a efecto. El letrado Santiago Segura Ferns, defensor de José Crespo Cuspinera, ha confirmado este extremo a EL PAIS por haber recibido la citación para comparecer en aquel momento.

A resultas de las declaraciones formuladas por el teniente coronel Juan Fernández Hidalgo así como por los tires anteriores implicados en la causa 200/82, el juez togado José Muñoz Sánchez, que sólo tiene competencia en la I región, solicitó por exhorto a la autoridad judicial de la II región, encamida por el propio capitán general Manuel Saavedra Palmeyro, que dictara auto de procesamiento contra el mencionado jefe. Los tres primeros procesados en la causa referida se encuentran desde hace algunas semanas como preventivos en la prisión militar de Alcalá de Henares.

El delito de conspiración para la rebelión que se imputa en el auto de procesamiento al teniente coronel Juan Fernández Hidalgo está tipificado en los artículos 286 a 2,94, así como en el 305, 538 y 868 del Código de Justicia Militar. A tenor del párrafo cuarto del artículo 184 del mismo Código "la conspiración se produce cuando dos o más personas se conciertan para la ejecución de un delito y resuelven ejecutarlo". La pena mínima en casos de conspiración y proposición para el delito de rebelión fue elevada a doce años y un día por la llamada Ley Orgánica de Defensa de la Constitución, que entró en vigor el 4 de mayo de 1981, mediante la reforma de los artículos 290 y 291 del repetido Código en respuesta a la escalada golpista- y terrorista. Al imputar al procesado un delito que se castiga con más de 6 años el juez togado ha debido decretar la prisión incondicional.

A tenor del artículo 286 del Código marcial, incurren en el delito de rebelión militar, por el que ha sido procesado, en grado de conspiración el teniente coronel Juan Fernández Hidalgo, aquellos que se alcen en armas contra el ordenamiento constitucional, el jefe del Estado, su Gobierno, o instituciones fundamentales de la nación, cuando la acción se reaIice por fuerza armada o apoyada en los ejércitos.

El teniente coronel Juan Fernández Hidalgo tiene 47 años y pertenece a la XI promoción de Infantería de la 31 época de la Academia General Militar de Zaragoza. Ocupó el número 36 de un total de 163 componentes. Se encuentra en la escala activa en el grupo de "mando de armas". Es diplomado de Estado Mayor y jefe especialista en carros de combate. Con el empleo de comandante estuvo destinado en la 2ª sección de Estado Mayor de la capitanía general de la III región militar con sede en Valencia como eficiente colaborador del coronel Diego Ibáñez Inglés condenado por rebelión militar en la causa del fallido golpe de, estado del 23 de febrero de 1981.

Cena-homenaje a Ibáñez Inglés

Ocupando ese destino el pasado mes de julio organizó una cena de homenaje a su antiguo jefe la noche de su llegada a Valencia para ser recluido en el regimiento mixto de Ingenieros número 3 de aquella capital. El otro organizador de la cena, que la agencia Europa Press califica indulgentemente de "cena organizada con urgencia para Ibáñez Inglés y los escoltas", fue el propio jefe de la mencionada unidad.

El capitán general de la región, Rafael Allendesalazar y Urbina, le impuso entonces, por "inexactitud en el cumplimiento de sus obligaciones reglamentarias", un correctivo mínimo de siete días. Con puntualidad escalafonada el entonces comandante Juan Fernández Hidalgo recibió poco después su segunda estrella de ocho puntas, que acreditaba el ascenso al empleo de teniente coronel quedando en situación de disponible en la citada plaza. El 22 de octubre pasado por orden firmada del jefe de Estado Mayor del Ejército y en aplicación del artículo 55 del reglamento de provisión de vacantes fue destinado forzoso y urgente a la caja de reclutamiento y movilización número 23 de Badajoz.

Este traslado y los de otros ocho jefes del Ejército dictados en virtud de la misma disposición legal fueron interpretados como consecuencia directa de las averiguaciones referentes a la intentona del 27 de octubre. Los nombres y empleos de los aludidos jefes, son los siguientes: Antonio Sicre Canut, coronel de Ingenieros; Angel Sánchez Aranda, teniente coronel de Infantería; Juan Vicente Grande Sáenz de Cenzano, teniente coronel de Artillería, Mariano Cañas Barrera, teniente coronel de Infantería; Joaquín Rodríguez Solano, teniente coronel de Infantería; José Puig Terrero, teniente coronel de Infantería; Ricardo Sáenz de Ynestrillas, comandante de Infantería y Antonio Crespo Poza, Comandante de Infantería. Las fuentes militares oficiosas que informan a Europa Press aseguran que las investigaciones sobre la intentona golpista del 27 de octubre prosiguen en todas las regiones militares.