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Andropov también puede ser jefe del Estado soviético

El nuevo líder comunista soviético, Yuri Andropov, parece haber entrado pisando fuerte. Tan fuerte, que algunos observadores estiman que podría ser él, y no Constantin Chernenko, quien sea nombrado además presidente del Presidium del Soviet Supremo (Parlamento), haciéndose así otro cargo, que lleva anejo las funciones de jefe de Estado.Hasta el pasado fin de semana, fuentes fiables daban como segura la promoción de Chernenko a la presidencia del Presidium, lo que, sin duda, facilitaría la tarea de Andropov dentro del partido, que vería cómo su competidor -y confidente del fallecido Breznev- abandonaba su influyente puesto en el secretariado del Partido Comunista soviético (PCUS).

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Este "modelo para la sucesión" resultaba además muy creíble, dado que las transferencias de poder han obedecido a lo largo de la historia de la URSS a un esquema semejante. Sólo Breznev aglutinó tres títulos: jefe del partido, del Estado y del Consejo de Defensa.

En su momento, desbancar al presidente del Presidium, Nikolai Podgorni, le costó a Breznev trece años. Visto el precedente, nadie creía que Andropov entrara con tanta fuerza como para hacerse con el poder absoluto en poco más de una semana.

Pero, si bien los círculos que apostaban por Chernenko siguen dándole su apoyo, una serie de extraños síntomas han llegado a hacer creer que Andropov está mucho más fuerte de lo que parece y se dispone a derrotar a sus adversarios agobiándoles con un arma inédita en la URSS durante los últimos siete años: la actividad.

Contra todo pronóstico, el Comité Central tardó un solo día en elegir nuevo secretario general después de que se anunciara el fallecimiento del viejo líder. El nuevo ritmo impuesto en el Kremlin desde entonces parece capaz de desbancar las previsiones más sensatas.

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Sin embargo, es excesivamente pronto para afirmar que Chernenko se encuentra en la cuneta: demasiada fuerza tendría que tener Andropov para dejar a los breznevianos sin ninguna parcela de poder, mientras se encuentren, al menos, en el secretariado del PCUS y el Politburó. Entre tanto, el nuevo pleno del Comité Central -que se reunirá el lunes 22- comienza a levantar mucha expectación. Hay quien, a priori, lo califica ya de pleno del siglo.

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