Otra 'patata caliente' para el PSOE
Vayan por delante dos puntualizaciones: primera, no pertenezco al partido socialista; segunda, estoy en condiciones de optar a varias de las plazas del concurso al que abajo aludo.Sin embargo, la convocatoria en los últimos días de concurso para la provisión de plazas de médicos de plantilla de la Seguridad Social me parece una inmoralidad de tal magnitud que me gustaría verla reflejada en su periódico. Durante más de dos años estos puestos de trabajo han permanecido bloqueados por un sinfin de razones, yjustamente ahora, a unos días de las elecciones, desaparecen como por ensabno toda serie de dificultades y se convocan centenares de plazas.
No me importa demasiado si es ésta o no una de las mil patatas calientes que, como se comenta en medios sanitarios, UCI) deja al PSOE dentro de una política general de tierra quemada o arcas vacías. Tiempo tiene aún el Gobierno entrante para enmendarlo si posee voluntad política para ello. Lo que me indigna es que brusca e inopinadamente, sin planificación racional alguna (ni tan siquiera la mínima medida de presión del colectivo médico como disculpa) se cubran centenares de puestos claves que hipotequen para años la ya destrozada, o inexistente, política sanitaria de este país. Para los que nos dedicamos a la medicina hospitalaria es ésta una desgracia difícil de resumir en pocas líneas. Imagínese lo que puede significar para nuestros pacientes. Pero al menos la sociedad tendrá el desahogo de cargar de nuevo con la culpa de sus males a los médicos, como es habitual. Nosotros, ni eso. / jefe de sección de la unidad coronaria de la Ciudad Sanitaria de Cruces.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.