La economía española crecerá un 2%, según la OCDE

La economía española experimentará un crecimiento en torno al 2% durante el año próximo, según las primeras previsiones elaboradas por la Organización de Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE), contenidas en el informe sobre la situación internacional para el año actual y las estimaciones para 1983. En el informe que aún no es definitivo porque tiene que ser sometido a examen por especialistas, se prevé un crecimiento de los precios en España del 13,5% y que el paro alcance al 17,4% de la población activa.

La OCDE ha revisado a la baja las expectativas existentes para 1982 en todos los países que forman parte de la misma en base a como se han ido concretando las principales magnitudes económicas. De esta forma, se estima en estos momentos que el crecimiento del comercio, medido en volumen, tendrá un crecimiento negativo de 0,6 puntos, cuando en el pasado mes de julio se había previsto un crecimiento positivo del 2,5%.Con esta premisa, la tasa de crecimiento económico para el conjunto de la OCDE ha pasado de estimarse inicialmente en un 0,5% a que se produzca un crecimiento negativo del 0,2%. No obstante, el informe de la organización internacional considera que la economía española crecerá este año un 1,6%, mientras que para la zona europea esta magnitud descenderá hasta colocarse en el 0,5%.

Expansión en 1983

Las previsiones de paro para finales de este año se sitúan en el 8,6% para el conjunto de la OCDE y el 16,1% para España; los precios, según el informe citado, subirán un 7,5% en el área de países miembros y el 15% en España. Todos estos datos muestran que a pesar de que la economía española experimentará un crecimiento mayor que el resto de las naciones de la organización internacional, seguirá aumentando el diferencial de precios entre ambas economías, lo que repercutirá negativamente en la competitividad internacional de los productos españoles, al tiempo que el nivel de paro seguirá siendo mucho más importante en España y con tasas de crecimiento más fuertes.

Los expertos de la OCDE consideran que el año próximo será algo mejor que el actual y las primeras estimaciones hablan de un crecimiento del 2% en el volumen de exportaciones de los países miembros, lo que permitirá que la economía lo haga en un 1,8%. Mientras que el conjunto de países miembros europeos crecerá el 0,9%, la economía es7 pañola llegará al 2%, a tenor de las previsiones de la OCDE.

La tasa de paro seguirá creciendo, situándose en el 9,3% para el conjunto de los veintitrés países que conforman la OCDE, mientras que en España el nivel de paro se situará en el 17,4%. Los precios, según el informe, continuarán bajando -hasta el 6,7% en el conjunto y el 13,5% en España-, pero el diferencial entre la media de la OCDE y la tasa de inflación española seguirá creciendo.

Expertos españoles consideran que si estas cifras de previsiones para 1983 se cumplieran significaría que la economía española tendrá relativamente una mayor actividad que el resto de naciones de la OCDE, por obtenerse tasas mayores de crecimiento económico; que seguiría la mejora en precios, en relación a la inflación del año anterior aunque no en materia de competitividad internacional de los productos españoles, y que el nivel de paro seguiría creciendo de forma preocupante como magnitud que no es capaz de controlar la actual política económica.

Puede haber revisiones al alza

No obstante, empieza a haber una cierta esperanza entre algunos economistas internacionales, que quieren empezar a creer que en estos momentos las magnitudes que se prevén se ajustan más a lo que luego es la realidad. Según ellos, en años anteriores las previsiones macroeconómicas eran demasiado optimistas, lo que obligaba a revisiones a la baja a lo largo de los ejercicios; en estos momentos se considera que, de haber equivocaciones, serían en sentido contrario, lo que incluso haría revisar al alza, posteriormente, las previsiones iniciales que ahora se mantienen sobre crecimiento económico y volumen del comercio internacional.

En cualquier caso, parece que a la luz de los resultados electorales, las magnitudes económicas que se ofrecen para la economía española en el informe de la OCDE deben tomarse con cau tela ya que el modelo de política económica a seguir a lo largo de 1983 puede variar y trastocarse de esta forma las cifras de crecimiento, inflación y paro.