La venida del Papa
A la vista de opiniones que aparecen en algunos medios informativos existen interpretaciones erróneas sobre las realizaciones que se están llevando a cabo en Loyola para acoger los acontecimientos que se prevén para el próximo 6 de noviembre, con motivo de la visita de Su Santidad Juan Pablo II a Euskadi.En primer lugar, conviene señalar que no ha sido derribado un solo árbol, pues la explanada a que se refiere el comentario no está situada sobre el parque y jardines que dan frente a la fachada principal, sino ocupando las pequeñas huertas y extensos pastos que constituyen las praderas frente a la fachada trasera del santuario.
Con posterioridad al 6 de noviembre, la citada explanada volverá a constituir la huerta y praderas preexistentes, si bien bajo un esquema ordenador y una geometría de caminos distinta a la anterior y más propia de un trazado barroco que de la estructura de parcelas que existía, totalmente disociada de la magnífica implantación y arquitectura del edificio.
La intención de cuantos responsables han participado en la preparación del hecho colectivo, estimado cuantitativamente como uno de los más importantes de cuantos se han producido en Euskadi, ha sido el intentar centrarlo fundamentalmente bajo unas coordenadas de cultura, e insertar las transformaciones mínimas que ha de sufrir el conjunto del santuario: basílica, jardines y huertas de Loyola, en un proceso de revalorización arquitectónica de los edificios y sus trazados circundantes, en su significación cultural dentro del valle del Urola.
Dicho proceso se halla ya comenzado desde hace varios años y conducido desde varias instituciones, entre las que destacan los Ayuntamientos de Azkoitia y Azpeitia, así como la Diputación Foral de Guipúzcoa y Gobierno vasco. / , director de arquitectura del Gobierno vasco.
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