Vecinos de Murcia quieren conservar los ambulatorios de barrio

Quinientos vecinos de numerosos núcleos urbanos (pedanías) dependientes de Murcia se concentraron el pasado martes, ante la sede del Instituto Nacional de la Salud (Insalud), para protestar contra el peligro de desaparición que amenaza a doce consultorios de barrio, instalados en otros tantos núcleos alejados de la ciudad. Por otra parte, ayer el gobierno provisional de la región anunciaba que se comprometía a subvencionar el mantenimiento de estas consultas de barrio, hasta el año 1983.El Insalud se niega a hacerse cargo de los ambulatorios que vecinos y ayuntamiento vienen organizando desde hace un par de años. El objetivo de estos pequeños ambulatorios es el de la descentralización, al acercar al médico y, en algunos casos, al pediatra a los asegurados. Estos centros de barrio fueron propiciados por las asociaciones de vecinos correspondientes, ante la centralización existente en el municipio de Murcia, donde se da el caso de que existen núcleos rurales que distan más de treinta kilómetros de la capital.

La organización y mantenimiento de dichos ambulatorios se compartió desde un principio por el Ayuntamiento de Murcia, que se encargó del alquiler de los locales; por la Consejería de Sanidad, que facilitó la asistencia de personal auxiliar, y, finalmente, por el Insalud, que envió los facultativos.