Carrillo recuerda que no hay pacto autonómico posible sin los nacionalistas

"Nosotros no estamos contra la LOAPA por razones electorales ni porque seamos nacionalistas, sino por una cuestión de principio. No la llevamos en la campaña como un tema tan fundamental como puede ser el paro, pero pensamos que no hay unidad de España si no es sobre la base de una autonomía real de cada uno de sus pueblos. El PSOE y Calvo Sotelo se han puesto de acuerdo para darle la vuelta al título VIII de la Constitución, bajo la presión de los poderes fácticos". Con estas palabras se presentó ayer el secretario general comunista, Santiago Carrillo, en Valencia, primer lugar de su recorrido electoral en el que hizo hincapié en el tema autonómico, rozado ligeramente en Galicia y Andalucía.

"El PCE estuvo, en un principio, en los pactos autonómicos y participamos subrayando un fallo serio: no estaban los nacionalistas vascos y catalanes, sin los cuales es impracticable un acuerdo", dijo también Carrillo en el curso de su exposición, Valencia, donde ayer coincidió la presencia de Carrillo con la fiesta anual del PCPV, es la primera provincia que visita el líder comunista donde son más claras las posibilidades de su partido. En Cantabria y La Coruña él mismo señaló las dificultades de que el PCE obtenga algún diputado y en Málaga, provincia en la que estuvo el sábado y que dio a las Cortes el primer diputado comunista de la Historia, Cayetano Bolívar, los propios comunistas locales albergan alguna duda de que puedan mantener la tradición.Pese a ello, el mitin del sábado por la noche en Antequera, comarca malagueña con gran implantación del Partido Comunista, fue el primero de un cierto calor humano, en el que más veces fue interrumpido por aplausos y donde dos ancianas -generalmente es gente de edad la que predomina en los actos electorales comunistas- dijeron a Santiago Carrillo que "eres más guapo de lo que sales en televisión". El líder tuvo que firmar autógrafos en las pegatinas y en la camisa de un hombre de cierta edad del servicio de orden, que comentó: "¡Esta ya no me la lavo!, ¡qué me voy a lavar!, lo malo es que no tengo muchas". El mitin de Antequera, interrumpido por una avería en la megafonía durante algunos minutos, ha sido, sin embargo, el menos cuidado de Carrillo, que eludió hablar de temas como el aborto, que en Galicia no tuvo precisamente una gran aceptación. Santiago Carrillo explicaría después que no había mencionado el aborto porque la avería le quitó tiempo y reconoció que "es el tema más impopular" de su programa.

La liberación de la mujer

Fue el de Antequera un mitin que tuvo muchos ingredientes: desde las actuaciones de Jarcha, y Lole y Manuel -las actuaciones están siendo de gran calidad: en Galicia cantaron, entre otros, José Menese y Rosa León- a la participación activa de un primer candidato en las listas provinciales, Antonio Nadal, sin acento andaluz, del que un señor del público no dudó en explicar: "Ese es el que va de ministro por Málaga". No faltó siquiera ese personaje conocido en todas las localidades como el menos listo del pueblo, que se empeñó en acercarse al escenario a dar la mano y charlar con Carrillo, mientras mostraba una pegatina con el lema electoral del partido.

Aunque fue el mitin más cálido, donde hubo alguna bandera autonómica y la gente, aun sin saberse la letra, coreó el himno de Andalucía, cantado por Jarcha puño en alto, Santiago Carrillo se empleó poco a fondo. Pasó de puntillas, por ejemplo, por el problema del paro y eludió casi toda la parte de su discurso, que repite de forma casi idéntica provincia a provincia, relativa a los derechos sociales y a los marginados. Aunque Carrillo no habla jamás, por ejemplo, de los homosexuales -le cuesta hasta pronunciar el término- sí aludió en El Ferrol, el viernes, a la juventud pasota: "Ningún voto de izquierda consecuente", afirmó, "puede dejar de ir al PCE. De izquierda consecuente o de los que se suelen llamar pasotas, que no lo son tanto, sino que: critican a una sociedad que sí que pasa de ellos".

Sí reiteró en Antequera, ante un auditorio que, por lo que respecta a su componente masculino, le miraba relativamente perplejo, la doble opresión de la mujer "por la clase capitalista y por nosotros mismos, los hombres", y dijo que "mientras no luchemos por la liberación de la mujer, no habrá posibilidad de emancipación auténtica para los trabajadores".

Por lo demás, Fraga sigue siendo el político al que más veces nombra Carrille, y al que más ataques dirige. "Se interrumpió el mitin", bromeó en Antequera, "cuando yo estaba criticando a Fraga Iribarne. Puede suceder que el nombre subleve hasta a la misma megafonía". Los socialistas, que siempre son en su boca "los compañeros socialistas", tampoco se libran de sus andanadas, revestidas siempre de consejo al electorado para que evite la derechización del PSOE. Y, entre medias, constantes recuerdos a quienes han abandonado el PCE: "Los comunistas de verdad ni cambian de chaqueta ni se retiran. Mueren luchando por la causa de los trabajadores y del PCE".