A Guerra le gustó más la intervención de Lavilla
Los políticos apenas hablaron entre ellos durante la proyección de la película. El líder de AP, Manuel Fraga, sólo cruzó un par de frases con sus compañeros de butaca, el dirigente catalán Míguel Roca y Agustín Rodríguez Sahagún, el hombre del CDS, que acudió en sustitución de Adolfo Suárez. La nota mas destacada la constituyó la discreta pero constante risa del socialista Alfonso Guerra, cuando la película que se estaba proyectando no era en absoluto divertida. La razón de esa jocosa actitud del número dos del PSOE era, según comentó él mismo al terminar la poryección, que simultáneamente estaba leyendo unos folios que le pasaban con rigurosa puntualidad, sobre lo que estaba diciendo Landelino Lavilla, a esa misma hora, en la primera cadena.Cuando los políticos procedían a abandonar la sala de proyección, Alfonso Guerra se acercó a Landelino Lavilla en un tono de abierta simpatía. Momentos antes, Guerra había comentado a este periódico: "La verdad, con el corazón en la mano, es que me dan pena".
En la segunda fila, separado de los demás políticos, estaba Santiago Carrillo. En uno de los descansos de la película, el dirigente del PCE comentó que ha estado repasando los úlltimos sondeos electorales que ha encargado su partido. A la pregunta de si esos sondeos dan suficientes diputados como para formar un grupo parlamentario propio -un mínimo de 15 diputados-, Carrillo, que no cesó de fumar, como es habitual en él, contesto con rapidez: "iClarooo!, los sondeos no nos favorecen, pero van mejorando".
El presidente de Unión de Centro Democrático, Landelino Lavilla, llegó casi al final de la película, acompañado de un nutrido grupo de asesores y cuidadores de imagen. Lavilla se sentó muy cerca del dirigente del PSA, Luis Uruñuela y del PNV, Xabier Arzallus, Pero no conversó con nadie.
Agustín Rodríguez Sahagún no quiso avanzar los principales puntos del programa electoral que el CDS hará públicos hoy: "Le hemos prometido a Adolfo no filtrar nada". Y no lo hizo.
En un momento dado, hablando del aborto, Fraga, con visibles muestras de afónia, apenas pronunció palabra "porque me guardo la voz para el coloquio", le espetó al representante del CDS: "Se lo digo contodo cariño y con todo respeto, pero el aborto lo tendrán ustedes el 28 de octubre". Rodríguez Sahagún, siguiendo la broma, le contestó: "Bueno, puede que no saquemos muchos diputados, pero seremos un grupo disciplinado y seguiremos trabajando para defender el centro, no como otros, que probablemente sevan a ir contigo al día siguiente de las elecciones".
Miguel Roca. leía en silencio el programa de AP, ya editado en forma de pequeño libro. Rodríguez Sahagún le preguntó al lider aliancista: "¿Y vuestras siglas cómo van a ser?". Fraga, extrañado, le contestó: "Por lo que se ve aquí en el libro, AP en letras muy grandes, y además esto", señalando los emblemas de los otros partidos de la coalición (PDP, UPN, PRA). En el segundo intermedio, algunos salieron a pasear, evitando conversar entre ellos. Al final de la película, se alisaron las arrugas del traje y bajaron al estudio muy serios, preparados para el combate.
Previamente, cuatro camareros uniformados, habían servido en la sala donde se proyecto la película -en una pantalla gigante-, una cena fría consistente en consomé, fiambres, y pasteles, y todo ello regado con vino y agua mineral. Antes y después de la cena, los políticos que intervinieron en el programa consumieron algunos vasos de whisky, bebida esta generalizada en todos ellos, a excepción del dirigente catalán Roca, que dada su condición de abstemio total, pidió una inocente tónica.
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