Reacción árabe favorable a la creacion de un Estado jordano-palestino
ENVIADO ESPECIALEn contraste con la actitud de la oposición política al régimen tunecino, que ha acusado a los dirigentes árabes de cobardía por sus reacciones mitigadas a la matanza de civiles palestinos en Beirut, la Liga Arabe se muestra favorable a las grandes líneas del plan de paz elaborado por Estados Unidos y estima posible la constitución de un Estado confederal jordano-palestino, propuesto por el rey Hussein de Jordania.
Esta reacción coincide con el interés que muestran las capitales árabes hacia las declaraciones del presidente de Líbano, Amin Gemayel, en favor de mantener a su país en el seno de la familia islámica.
No hay unanimidad en la organización árabe al analizar los resultados de la reciente reunión ministerial en torno al drama vivido en Beirut. Para los diplomáticos libios, la matanza de civiles indefensos viene a confirmar la justeza de las advertencias hechas por el coronel Gadafi en el sentido de solicitar a la Organización para la Liberación de Palestina que eligiera el suicidio, en lugar de abandonar Beirut. Una parte de la Prensa tunecina, empezando por el prestigioso matutino Le Temps, ha adoptado esa tesis y ha acusado a los ministros árabes de no "sentir en su propia carne" la matanza.
En la Liga Arabe se pone de relieve que, a pesar de la actitud radical de Trípoli, existe un consenso para no disociar a Estados Unidos de una negociación política al conflicto en Oriente Próximo, y se confía en que la próxima misión a Washington del comité especial creado por la cumbre árabe de Fez para explicar el plan de paz adoptado en Marruecos contribuya a serenar los ánimos.
"Es evidente", subrayan los funcionarios de la organización árabe, "que la constitución de una comisión de investigación sobre la matanza de los campos de refugiados, bajo presión norteamericana, sería acogida con satisifacción por todos nosotros, pero la negativa de Beguin y Sharon y la falta de reacción de Estados Unidos han vuelto a disminuir las posibilidades de entendimiento entre los árabes y la Administración del presidente Reagan...".
El acceso a la presidencia libanesa de Amin Gemayel ha suscitado en la sede de la Liga Arabe un interés considerable. Sendos mensajes de felicitación enviados por el presidente Habib Burguiba y el secretario general de la organización, Cheli Klibi, han sido analizados aquí como la expresión de una voluntad conciliadora con el nuevo jefe del Estado libanés, de quien se aprecian sus declaraciones en favor de la unión con el mundo islámico.
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