España mantiene su nivel de crédito en el mercado exterior

España mantiene su nivel de crédito en los mercados mundiales de capitales, aunque con ligera pérdida en puntos frente a la calificación que los banqueros internacionales le concedían hace seis meses.

En la lista que semestralmente elaboran las dos publicaciones especializadas más importantes, España consigue mantener su nivel de calificación como prestatario, pese a que todos los países europeos, como conjunto, experimentaron un ligero retroceso en el último año.

La revista Institutional Investor, por ejemplo, coloca a España en el puesto número veinticinco, el mismo que ocupaba en su última clasificación el pasado marzo. De acuerdo a una calificación de máximo cien, España tiene 64,7 puntos, frente a los 97 de Estados Unidos (el primero) o los 94,1 de la República Federal de Alemania, el primero europeo.

Al comentar caso por caso, el último número de la revista citada evita hacer cualquier declaración sobre España, en una indicación de que nada importante ha afectado, en el último año, la tradicional confianza de los bancos e inversores en el país. En la edición del pasado año, sin embargo, la revista hacía comentarios negativos sobre la influencia que podía haber tenido la intentona militar del 23 de febrero.

El nivel de calificación o crédito de un país de la revista institucional Investor, la más seria de las clasificaciones que se elaboran, se basa en un amplio cuestionario entre los principales banqueros mundiales y entre los encargados de los créditos internacionales de las principales instituciones de crédito mundiales.

Por su lado, Euromeney, la otra publicación que elabora listas sobre los niveles de crédito, coloca a España en el puesto número trece, con 86,8 puntos sobre cien. Esta lista está basada en, un cálculo estadístico sobre los spreads o diferenciales que cada país ha conseguido en sus créditos sindicados o emisiones de bonos en los mercados internacionales.

Por vez primera, Euromoney publica una lista sobre el futuro de la economía de cada país en caso de persistir las actuales tendencias en crecimiento y políticas económicas. Según la revista, España es el único país entre las diez primeras potencias económicas del mundo que perdería su puesto -el décimo- en el año 2000. Bajo su análisis, de persistir los actuales índices de crecimiento, la economía española se situaría en el puesto número quince dentro de veinte años.

Las dos listas ofrecen algunas curiosas anotaciones respecto a otros países. México, por ejemplo, de los 107 países considerados por la publicación Investor es el el país que más puntos ha perdido en seis meses. En términos anuales, le anteceden Rumania, dentro del bloque oriental, y Argentina, este país como consecuencia de la guerra de las Malvinas.

El caso mexicano es especialmente grave, porque el número de la publicación citada había ido a imprenta días antes del anuncio de la nacionalización de los bancos privados por López Portillo. Según la revista, México perdió ocho puntos, bajando su crédito de 62 a 54.

Dentro de Latinoamérica, Brasil constituye el caso más significativo, ya que dentro de su mal rating ha mejorado dos puntos en un semestre, y casi 3,3 puntos en un año. Como siempre, la confianza de los inversores en Brasil se basa en su futuro y sus inmensas reservas naturales.

Argentina, por el contrario, ha perdido trece puntos en seis meses y casi veinte en un año. Su puesto en la clasificación regional del continente bajó del puesto sexto al décimosegundo.