Encierro en los astilleros de los 2.000 trabajadores de Unión Naval de Levante
Los 2.000 trabajadores de la empresa Unión Naval de Levante (UNL) iniciaron ayer un encierro por tiempo indefinido en los astilleros del puerto de Valencia, hasta encontrar una salida a la crítica situación económica en que se encuentra la factoría.Paralelamente, un centenar de trabajadores, en pequeños grupos, se encerró a media mañana en las ocho oficinas que el Banco Central tiene instaladas en el centro de Valencia, donde entregaron un escrito en el que valoraban esta actitud como la única posible para alertar a la opinión pública de que el Banco Central, principal accionista de los astilleros, adeuda a la plantilla dos nóminas y una paga extraordinaria.
Los encerrados fueron disueltos sin resistencia por la Policía Nacional poco antes de las tres de la tarde.
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