Razones de una convocatoria electoral

Desde nuestra consideración de que se trata de un mal menor creemos que las razones principales de la convocatoria de elecciones generales cuatro meses antes de lo normal pueden resumirse en cuatro. No es ningún secreto que los Gobiernos suelen elegir el momento que más les favorece -o que menos les perjudica- para hacer la llamada a las urnas. Esto, aquí y en el mundo democrático.Ello aparte, la primera razón de peso ha sido la imposibilidad práctica de llevar a cabo una mínima tarea de gobernación del país -con graves problemas pendientes- debido a la creciente debilidad del partido del Gobierno en el Parlamento. ( ... )

La segunda razón, en la que el presidente también ha querido poner, especial énfasis, ha sido el práctico agotamiento de la legislatura, aunque deja sobre la mesa importantes asuntos pendientes, como son, por ejemplo, los estatutos de autonomía de Baleares, de Castilla-León, de Extremadura y de Madrid, y será necesario prorrogar los actuales presupuestos estatales al no poderse aprobar los correspondientes de 1983.

La necesidad de que se produzca una clarificación en el mapa político, tras la aparición de nuevos partidos, en la derecha y en la izquierda, pero sobre todo en el espacio llamado de centro, es urgente y prioritaria a todo intento y posibilidad de coaliciones y pactos -si se quiere que no sean falsos ni desfiguradores- para continuar gobernando. Este, creemos, es el tercer aspecto que se ha tenido en cuenta, principalmente tras la psicosis electoralista que se ha ido apoderando del país en los últimos meses.

La cuarta consideración -seguramente decisiva, aunque no confesada- para decidir adelantar la convocatoria electoral ha sido, sin lugar a dudas, el intento de frenar la rápida descomposición de Unión de Centro Democrático por obra y gracia, principalmente, de quien fue su fundador, Adolfo Suárez. ( ... )

28 de agosto