Juan Pablo II erige el Opus Dei en prelatura personal

El Opus Dei ha ganado la batalla. Ayer fue anunciado oficialmente que el papa Juan Pablo II ha aprobado definitivamente el nueve estado jurídico de los hijos de Escrivá de Balaguer, que a partir de este momento serán en la Iglesia una prelatura personal. De este modo salen de la jurisdicción de la Sagrada Congregación de Religiosos para entrar en la de obispos. La noticia fue dada ayer mañana por el director de la sala de Prensa del Vaticano, con este lacónico comunicado oficial: "El Papa ha decidido la erección del Opus Dei a prelatura personal. Sin embargo, la publicación del documetno correspondiente se retrasa por motivos técnicos". Fuentes de la Obra en España afirmaron desconocer su contenido.

La decisión final ha sido anunciada después de una cena que reunió en el Vaticano, el sábado por la noche, a Juan Pablo II, al cardenal Sebastiano Baggio, conocido por su proclividad hacia el Opus Dei, y al presidente de la Conferencia Episcopal española, Gabino Díaz Merchán, al que se tiene por contrario a la elevación de la Obra a prelatura personal.El comentario ayer era unánime: "Hay que esperar a que salga el documento". Algunos, sin embargo, han anticipado que probablemente se trata de una solución de compromiso entre lo que habían pedido los miembros del Opus, es decir, una prelatura nullius cum populo propio, y lo que hubieran querido muchos obispos.

El portavoz del Opus Dei en Roma, ingeniero Corignone, consultado telefónicamente, ha explicado que el Papa ha querido confirmar públicamente la aprobación del nuevo estado jurídico del Opus "para cortar por lo sano los rumores que inducían a error a la opinión pública de la Iglesia, y que no correspondían a la naturaleza de la decisión del Papá". Concretamente, el portavoz de la casa central del Opus afirmó que prelatura personal no es lo mismo que diócesis personal o vicariato castrense. Estas últimas tienen como base, dijo, la independencia absoluta respecto a los obispos del lugar, mientras la personal debe respetar los derechos de los obispos diocesanos.

Según algunos juristas consultados por EL PAIS, la diferencia entre la prelatura nullius, que da una independencia total de los obispos, y la personal puede consistir en que ésta posee una independencia, sobre todo en el fuero interno, nuentras en el extemo está más condicionada a las decisiones de los ordinarios.

De cualquier modo, los 75 expertos de todo el mundo convocados por el Papa para examinar el nuevo códice de Derecho Canónico, que está listo para ser aprobado definitivamente, se mostraron, en noviembre de 1981, casi todos contrarios a la creación de la nueva figura jurídica de prelatura personal y algunos habían preguntado concretametne si se trataba de la fórmula que se deseaba usar con el Opus Dei.

Ayer se subrayaba ya en la Prensa italiana, que anticipaba los rumores de la decisión papal, que Juan Pablo II ha querido dar esta aprobación al Opus, contra el parecer de muchos obispos, sobre todo los españoles y el famoso cardenal Basil Hume, arzobispo de Westminster, actual primado de la Iglesia del Reino Unido, el cual, en febrero pasado, había promovido una investigación sobre las actividades del Opus Dei en su país.

El diario Il Messagero subraya que quizá no sea una coincidencia el hecho de que se halle estos días en Roma el presidente de la Conferencia Episcopal Española, Díaz Merchán, el cual, dice el diario: "Había sido precedentemente contrario a este proyecto". Y ayer la agencia Kronos, que recuerda que han sido 97 los cardenales que pidíeron que se abriera el proceso de beatificación del fundador del Opus Dei, Escrivá de Balaguer, comenta la noticia vaticana con estas palabras: "La prelatura personal dará al Opus Dei una autonomía casi total de los obispos de las diócesis donde trabajan. Y sólo cada cinco años estará obligada a presentar a Roma un documento acerca de sus relaciones con los otros obispos".

Y añade que el Opus Dei será la primera organización eclesiástica intemacional «que obtiene un nuevo estatuto jurídico antes de la publicación del nuevo códice de Derecho Canónico".

Y por lo que se refiere a la novedad de la prelatura personal concedida por el Papa al Opus se comentaba ayer en Roma que consiste en el hecho de que en ella participan no sólo los sacerdotes de la Obra -que son sólo el 3% de sus miembros-, siño también sus 72.000 socios, hombres y mujeres, célibes o casados, los cuales pedirán ahora ser incorporados al Opus Dei con pleno título.

Por lo que se refiere al momento escogido por el Vaticano para difundir una noticia tan importante se daban ayer vanas versiones. La más maliciosa es que el Papa ha querido escoger este momento de plenas vacaciones para que la noticia pase lo más inadvertida posible. De hecho, en Roma misma están fuera casi todos los teólogos, juristas y expertos religiosos que podrían tratar el tema. Lo mismo ocurre por lo que se refiere a los obispos de medio mundo.

Otros piensan que el papa Juan PabloII no quería ir a España sin haber resuelto el problema del Opus, una institución de raíz española, que, al parecer, se va a volcar para asegurar el mayor éxito posible al primer viaje de un Papa a la católica España.

Como tampoco se excluía el hecho de que el Vaticano haya querido anunciar, sin esperar más, este importante reconocimiento al Opus, que indudablemente le confiere un gran prestigio y poder mundial precisamente en el momento en que la Prensa de todo el mundo está difundiendo los rumores sobre posibles connivencias del Opus con el hosco tema del Banco Ambrosiano y de la muerte de su ex presidente, Roberto Calvi.