Los Ejércitos de Irán e Irak se enfrentan en los combates más sangrientos desde el comienzo de la guerra

La guerra irano-iraquí se ha intensificado bruscamente durante las últimas horas, en lo que constituye una de las batallas más encarnizadas registradas entre las tropas de ambos bandos desde el comienzo del conflicto, en septiembre de 1980. El alto mando militar iraní aseguró ayer que en la noche del miércoles y la madrugada siguiente las tropas de Irán destruyeron 380 carros de combate y vehículos blindados iraquíes, en un área de 250 kilómetros cuadrados en los alrededores del enclave de Zeid, sobre el territorio de Irak, cerca de la ciudad portuaria de Basora.

El mismo comunicado oficial destaca que al menos 2.100 soldados enemigos han encontrado la muerte en esta batalla.De acuerdo con la información oficial, que no recoge el número de bajas sufridas en sus filas, las unidades iraquíes más dañadas en este combate han sido la 10 brigada mecanizada, la 351 y la 431 brigadas blindadas de la novena división iraquí, y de la 31 división de Irak desplegada en el frente, las más afectadas han sido la 6ª y la 12ª brigadas blindadas y la 8ª brigada mecanizada.

Siempre según las fuentes militares iraníes, los batallones Jaffa y Zein uld Quods de carros de combate, adscritos a las divisiones 10ª y 5ª, respectivamente, han sido completamente destruidos por los blindados, la artillería y los combatientes islámicos, a lo largo de la batalla librada durante la noche y madrugada de ayer. El comunicado oficial agregó que 250 soldados iraquíes fueron capturados y trasladados a las líneas iraníes de retaguardia.

Entre las víctimas se encuentra el coronel jefe de una de las brigadas blindadas y varios altos oficiales.

La guarnición de Zeid, conquistada por las tropas iraníes al comienzo de la operación Ramadán, que se inició el martes de la pasada semana, se ha convertido en el eje momentáneo de los primeros días de la contienda. Esta batalla, presumiblemente la más cruel para ambos bandos desde el comienzo de la irrupción en territorio de Irak, se desarrolló en las zonas norte, sur y oeste del enclave citado, desde donde se cree que las tropas iraníes inician sus ataques y resisten los contraataques de Irak.

Entre el material de guerra destruido, según las fuentes mencionadas, se encuentran dieciséis carros de combate soviéticos del tipo T-72, un modelo de tanque de los más evolucionados que existen.

La batalla de Zeid, cuyo fragor a distancia es imaginable a tenor de la envergadura de las bajas y pérdidas de material de guerra, se inició poco después del crepúsculo del miércoles, durante la última jornada del mes del ayuno islámico del Ramadán, que lleva el mismo nombre que la operación de los iranies sobre suelo de Irak.

Si bien la información de la batalla no fue difundida ayer hasta las cuatro de la tarde, hora local (14.30, hora de Madrid), la programación de un informativo militar especial, a primera hora de la mañana, por Radio Teherán, permitió prever la envergadura de los combates de la noche pasada.

Hasta el momento, la información oficial iraní repetía insistentemente que los combatientes habían afrontado con éxito numerosos contraataques, lo cual se interpretaba como que las líneas de penetración iraní, si bien consolidadas, no progresaban.

Los observadores consideran, desde Teherán, que, tras la batalla del área de Zeid, las defensas blindadas iraquíes han sufrido un importante descalabro, que en los próximos días -incluso horas- puede propiciar el sitio directo de Basora.