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¿Victorias para Margaret Thatcher?

La epoca sombría para la izquierda política y sindical británica. ( ... )Pero la impresión que domina como resultado de esta batalla del ferrocarril, especialmente costosa para la economía del Reino Unido, es la eficacia de la estrategia de firmeza de Margaret Thatcher, que acaba de obtener una brillante confirmación.

La lección es amarga para los sindicatos. En principio, para el sindicato ferroviario, obligado a capitular sin condiciones. Su secretario general, Buckton, no ha tratado de disimular cuando al pedir a los obreros la vuelta al trabajo tuvo palabras muy duras para las organizaciones obreras. Pero, para éstas, igualmente las enseñanzas de este fracaso son dolorosas.

Numerosos comentaristas celebran la sabiduría de los sindicatos (Trade Unions Congress), cuya falta de entusiasmo por la huelga ha obligado al sindicato ferroviario a ceder. No es seguro que la mayoría de los dirigentes sindicales se regocije de estos homenajes tan embarazosos. ( ... ).

Malestar que el Partido Laborista sufre igualmente. Su líder, Foot, se había comprometido con los huelguistas tan fogosamente, que sus amigos del gabinete fantasma le habían llamado al orden y aconsejado mayor prudencia táctica. ( ... )

No se puede negar a Margaret Thatcher su capacidad para ganar, batalla tras batalla sin concesiones ni desviaciones. A lo que se puede responder que desde las Malvinas al clima social, de Irlanda del Norte a la CEE, la primera ministra británica se ilustra más por sus victorias que por la búsqueda de soluciones a los problemas de fondo.

20 de julio

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