Roy Jenkins, un líder socialdemócrata que aspira al 10 de Downing Street
El pasado viernes, Roy Jenkins fue elegido líder del Partido Socialdemócrata británico (SDP) por decisión de la mayoría (un 56 %) de sus 65.000 miembros, que le prefirieron a su oponente, David Owen. Jenkins representa la moderación reformista y el deseo de alianza con los liberales para "ganar las próximas elecciones", como él mismo dijo.
Roy Jenkins es un hombre meticuloso, preciso y al que le gusta ganar. Su elección al liderazgo del Partido Socialdemócrata británico (SDP) abre las puertas a una sólida alianza con los liberales, templada hacia la derecha en los temas económicos. Es el candidato nato a primer ministro de esta alianza, con una larga experiencia política a sus espaldas. La alianza puede aspirar con él -más que con David Owen- a moderar tanto sobre el electorado laborista como sobre el conservador, que es más numeroso.David Owen, derrotado con honra en la primera vez, en la historia política británica, en que los miembros de un partido eligen directamente a su líder, quería un SDP más independiente de los liberales y Más radical. Jenkins, por el contrario, pretende romper el molde izquierda-derecha. No es un socialista, sino un reformista que hubiera pertenecido al Partido Liberal si éste hubiera estado vivo cuando Jenkins entró en la política.
Jenkins nació en noviembre en 1920 en una familia galesa minera venida a más a través de la política. Su padre fue diputado laborista. Jenkins se educó en escuelas estatales -a las que también"ha mandado a sus tres hijos-. Fue, sin embargo, a estudiar a Balliol, en Oxford, con excelentes resultados. Llegó a presidente de la sociedad de juniores de Balliol, sucediendo en este puesto a dos nombres conocidos, Edward Heath y Denis Healey. Entró en la vida parla mentaria en 1948, cuando logró su primer escaño por el Partido Laborista. Tardó, sin embargo, en llegar a las alturas del partido aunque pronto acumuló una experiencia que le convierte hoy en el mejor candidato a primer ministro de la alianza liberal-socialdemócrata. Ocupó los puestos de ministro de Aviación (19641965) y del Interior (1965-1967), cargo en el que se forjó su reputación de reformista al promover la primera ley de Relaciones Raciales.
Canciller del Exchequer
Llegó a canciller del Exchequer en 1967, pero en 1970 el Partido Laborista perdió las elecciones y comenzó a girar hacia la izquierda. Jenkins se había creado enemistades entre los laboristas con su política de control salarial.
La inflación había alcanzado un 5% y el paro el medio millón. Eran otros tiempos. Ahora, los laboristas consideran que fue un buen canciller. En 1970 Jenkins fue elegido líder adjunto del partido, cargo del que dimitió dos años después. Entre 1974 y- 1976 volvió a ser ministro del Interior.
Fue en 1976 cuando Harold Wilson dimitió como primer ministro y líder del laborismo. Jenkins se enfrentó a Jarnes Callaghan para este puesto y perdió. David Owen aconsejó entonces a Jenkins que aceptara la presidencia de la comisión de la Comunidad Europea. Jenkins abandonó el Parlamento y se marchó a Bruselas a ocupar este puesto hasta enero de 1981.
En Bruselas, Jenkins tuvo una actuación discreta. Su papel se vio mermado por la crisis del petróleo y los problemas de la economía mundial. Fue él, sin embargo, el propulsor del Sistema Monetario Europeo.
Roy Jenkins siempre -es decir, desde 1955- había tenido fe en el Mercado Común. El tema europeo es la espina dorsal del SDP. Fueron David Oweri, Shirley Willianis y Williani Rodgers los que se agruparon en torno a Jenkins cuando éste dimitió de líder adjunto del laborismo en 1972, después de que el partido se hubiese comprometido a un referéndum sobre la permanencia británica en la CEE cuando regresaran al poder en 1974.
El tema europeo volverá a surgir en el futuro. Los laboristas están cada vez más decididos a sacar al Reino Unido del Mercado Común. Margaret Thatcher y su Partido Conservador, por otra parte, han adoptado tras la guerra de las Malvinas una actitud que tiende hacia un gaullismo británico. Los únicos verdaderamente pro europeos son los socialdemócratas y liberales.
Alianza con futuro
Y Jenkins confía en que esta alianza tendrá éxito. Ha indicado que la guerra civil en el seno del laborismo hará a este partido predicciones sobre la recuperación económica que mostrarán ser falsas, convirtiendo a la alianza en el único verdadero partido de gobierno una vez superado el efecto Malvinas, que ha reforzado a los conservadores. El verdadero impulsor de un grupo que intenta romper el molde bipartidista de la política británica ha sido Roy Jenkins. Pero estaba fuera del Parlamento. El valiente, el que provocó la escisión con el laborismo, fue David Owien.
Jenkins tiene más de patricio que de plebeyo, indican sus antiguos compañeros en el Partido Laborista. Pero en la elección parcial de Hillhead (Escocia), que le permitió regresar al Parlamento en m.arzo, Jenkins dio muestras de acción y lucha. Fue una campaña electoral exhaustiva. Jenkins hace buenos discursos, aunque algo lentos. Pero sabe limitarse a media hora, con algún chiste entre medias, aunque tiene grandes problemas para pronunciar la u y la s.
Juega al tenis y practica la natación. Su deporte favorito es, sin embargo, el criquet, un juego de precisión. A Jenkins le gusta dominar los números. En 1943, durante la segunda guerra mundial, trabajó como capitán de Artillería en el centro de desciframiento de Bletchey, donde se rompían los códigos alemanes.
En el terreno político, Jenkins está intentando crear un new deal contra el desempleo, con inyección de fondos públicos y una política de control salarial. También es partidario de recortar el poder de los sindicatos, con los que el SDP no mantiene ningún contacto formal.
Salvo en el tema de la descentralización administrativa, el programa del SDP o de la alianza sigue siendo un misterio, que quizá no llegue a resolverse nunca.
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