Egipto pone a punto los preparativos para la recuperación del territorio

ENVIADO ESPECIAL, El Gobierno egipcio ha puesto a punto los preparativos finales para tomar posesión del Sinaí el próximo día 25 y confía en que las autoridades israelíes concluyan su presencia en la zona ese mismo día, a pesar de las dificultades surgidas en las conversaciones tripartitas egipcio-norteamericano-israelíes para terminar esa fase decisiva de los acuerdos Camp David.

Egipto vive febrilmente los últimos días de la ocupación israelí del Sinaí, y se dispone a reinstaurar su soberanía, dentro de las limitaciones trazadas por los acuerdos de Camp David, restando importancia al clima de suspición que reina en la capital israelí, y que ha llevado recientemente a miembros del Gabinete del primer ministro, Menájem Beguin, a amenazar con una suspensión de la evacuación de la península fronteriza con el Estado hebreo.

Nadie cree, en la capital cairota, que Israel aplace la evacuación de la península, a p9sar de que los egipcios conceden que la posición del presidente Hosni Mubarak hacia los palestinos es bastante diferente de la que sostenía el asesinado Anuar el Sadat. En sustancia, los problemas que siguen dividiendo a egipcios e israelíes son de dos órdenes: técnicamente, las dos partes no se han puesto de acuerdo sobre el trazado fronterizo de la bahía de Tabah, en el golfo de Aqaba, así como sobre otros catorce puntos fronterizos de menor importancia.

Acuerdos de Camp David

Políticamente, el desacuerdo se centra en la interpretación del espíritu y la letra de los acuerdos de Camp David. Israel estima que El Cairo los ha violado al incrementar sus contactos con la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) y al aumentar mas allá de lo autorizado el número de tropas egipcias que ya estacionan en el Sinaí.

Los egipcios, por boca del presidente Hosni Mubarak, han vuelto a asegurar que cumplirán estrictamente los acuerdos de Camp David y no los violarán pero, al mismo tiempo, advierten que "la única cuestión que compromete a El Cairo es el documento tripartito y nada más...", haciendo así implícitamente referencia a una previsible normalización de las relaciones entre Egipto y el resto del mundo árabe.Para resolver el litigio fronterizo, podría crearse una zona neutra provisional, englobando las pequeñas parcelas sobre cuyo trazado los dos Gobiernos no llegan a ponerse de acuerdo. Esa solución ha sido preconizada por Walter Stoessel, mientras el Gobierno cairota prefiere que se resuelvan antes del día 25 de abril, aunque ello obligue a las tres partes a mantener conversaciones maratonianas.

Zona neutra

Lo que más tranquiliza el los egipcios es la atmósfera de calma que rodea a la delegación dirigida por Stoessel, quien ha repetido el pasado domingo al presidente Mubarak que Estados Unidos cuenta con la promesa formal de Israel de concluir la evacuación del Sinaí en la fecha prevista.

A pesar de ello, bajo la aparente tranquilidad de los egipcios planea la incertidumbre, ya que nadie sabe aquí qué saldrá de la reunión extraordinaria del Gabinete israelí, anunciada para el miércoles próximo y destinada a discutir los últimos problemas de la zona, uno de los cuales es la amenaza de un grupo de colonos israelíes, residentes en el norte del Sinaí, de inmolarse colectivamente, para protestar por la evacuación.

Israel intenta obtener una concesión suplementaria de las autoridades egipcias, relativa a la firma de un documento por el que El Cairo se comprometería no apoyar la creación de un Estado independiente palestino, dirigido por la OLP. Esa concesión es muy difícil que pueda ser otorgada por el nuevo régimen egipcio.

El valor fundamental de los acuerdos de Camp David, para el Gobierno egipcio, radica en que éstos representan una base para la realización de una paz global en Oriente Próximo. En ese sentido, Mubarak ha reafirmado el deseo de Egipto de continuar el proceso de paz después de la evacuación del Sinaí, pero al mismo tiempo ha expresado que los acuerdos tripartitos integran los principios fundamentales de esa paz global, y por eso mismo, antes de la evacuación no hay lugar para nuevos compromisos, como desea Israel.