La dirección del PSOE intenta controlar la Diputación de Valencia

La dimisión de cuatro diputados provinciales de Valencia pertenecientes al grupo socialista de la Diputación, obedece a una operación de la ejecutiva del Partido Socialista del País Valenciano (PSPV-PSOE) para hacerse con el control de la corporación, según han asegurado a EL PAÍS; diversas fuentes de esta formación política. Los cuatro diputados -Francesc Soria, Julián Crespo, Pere Fos y Marcelino Almiñana- presentaron la dimisión a instancias de la ejecutiva.La Diputación, presidida por el socialista Manuel Girona, que pertenece al sector nacionalista del partido, ha venido funcionando hasta ahora muy descoordinadamente con respecto a la ejecutiva. La dirección surgida del último congreso del PSPV-PSOE, de la que quedaron excluidos los nacionalistas y a la que accedieron representantes de Izquierda Socialista, parece haber determinado cambiar la composición de la corporación para aproximarla a las posturas del sector mayoritario, el oficialista, que encabeza el secretario general Joan Lerma y el secretario de política institucional, Felipe Guardiola. Soria y Crespo, que, fueron expedientados por las críticas dirigidas a la dirección del partido tras su cese, han sido ya oficialmente sustituidos por Cipriá Císcar y Leonardo Margareto. Aunque los otros dos no tienen todavía sucesor, diversas fuentes del partido coinciden en que Almiñana será sustituido por el alcalde de Alcira y director general de Administración local del Consejo del País Valenciano, Francisco Blasco.

La entrada de Blasco en la Diputación parece ser el elemento más decisivo de la operación. Hombre muy próximo a Guardiola, es conocido por sus posturas abiertamente españolistas. Todo parece indicar que pasará a coordinar el plan provincial de obras y servicios.